SANTO DOMINGO, República Dominicana.- La Fundación Francina se acercó a padres con discapacidad visual y progenitores de personas con dicha condición quienes aportaron sus impresiones y testimonios acerca de su experiencia, con el objetivo de contribuir a cambiar la visión que se tiene de los discapacitados con motivo de la celebración del día de los padres este próximo domingo 31 de julio.
“La motivación y entrega de cada una de estas figuras paternas, ante un reto por partida doble, constituyen un referente para todos los padres de la República Dominicana”, dijo su presidenta Francina Hungría.
Manifestó que es una práctica habitual, que el entorno familiar o afectivo así como los profesionales de la salud, interfieran en el deseo de ser padres de los adultos con discapacidad. “Se antepone su supuesta incapacidad para asumir su papel de padres, se les dice que su deseo es irracional”.
Insistió en que suele imperar el falso concepto de la persona con discapacidad dependiente de sus progenitores, carente de las habilidades para tener una relación adulta e independiente, una vida laboral y una vida familiar propia.
“Sí bien es cierto que todo eso es más difícil de conseguir para las personas con discapacidad que para el resto de las personas, no es imposible”
Dijo que en el caso de los padres de niños o adultos con discapacidad, es importante entender que en el momento en que se diagnostica una discapacidad hay que tener en cuenta la fuerte repercusión que acomete en el entorno familiar, sobre todo en los padres que ven cómo todos los ámbitos de su vida cambian para siempre.
Francina destacó que los padres son el recurso más importante que tiene una persona con discapacidad y muchas veces son su único amigo y defensor; por lo que resulta primordial que logren entender que todas las personas tienen algo valioso que no solamente se refleja en lo físico, en lo intelectual ni en aquellas características a las que cada uno le da un valor agregado, sino en la oportunidad de aceptar las diferencias sin temor y con la mente y el corazón abiertos.
Concluyó que en esencia, todos los padres cuidan mejor a sus hijos si tienen buena información y ayuda; y lo más importante, siempre será asegurar un contexto afectivo equilibrado para los hijos.