SAN CRISTÓBAL, República Dominicana.- El procurador general de la República, Francisco Domínguez Brito, entregó un donativo de útiles escolares a los hijos de las privadas de libertad del Centro de Corrección y Rehabilitación Najayo-Mujeres, de San Cristóbal.
El donativo realizado por la Fundación Kukuta fue un total de 334 mochilas debidamente equipadas, entregadas a los infantes con el propósito de que puedan dar inicio al año lectivo 2014-2015.
Al pronunciar unas palabras en el acto, el procurador Domínguez Brito manifestó satisfacción de poder entregar los materiales educativos a los niños y niñas de las internas, quienes cursan el nivel pre-primario, básico y medio.
“De esa manera ellos no se ven en la necesidad de paralizar sus estudios por la ausencia de la madre en el hogar”, dijo.
Los materiales fueron distribuidos a 249 niños del nivel básico, 38 a los pequeños que se encuentran en el nivel inicial o pre primario, y las 57 restantes a los menores que cursan la educación media.
El Procurador General hizo la entrega en el salón de actos del CCR Najayo-Mujeres, en compañía del director del Modelo de Gestión Penitenciaria, Ysmael Paniagua, así como de la presidenta de la Fundación Kukuta, Lucy Doughty, entidad que hizo el donativo.
En el acto también habló la presidenta de la fundación, quien agradeció al Ministerio Público la oportunidad de poder llegar hasta las internas y de esta forma poder brindar un poco de amor y esperanza a esas madres, privadas de libertad, que hoy están lejos de sus hijos.
Sostuvo que la entidad que dirige es una organización sin fines de lucro que busca acercarse más a este tipo de personas que por circunstancias adversas se encuentran en una prisión cumpliendo una condena, donde lo único que persiguen es llevar un poco de amor.
Durante el desarrollo del acto, las internas de Najayo presentaron una obra donde dejaron como mensaje la importancia que juega la educación en el sentido de que da la esperanza de abrir las puertas hacia el futuro.
También, la interna Noemí Domínguez Durán en una décima contó a los presentes su experiencia y el desarrollo que ha experimentado desde su entrada al centro de corrección y rehabilitación.