Genara Sánchez/Especial para Acento.com.do

SANTO DOMINGO, República Dominicana.- A pesar que las promesas que realizan los políticos son parte de las estrategias para conseguir el favor de los votantes, las mismas parecen estar cayendo en el terreno infértil del escepticismo popular, pues los ciudadanos han empezado a comparar las promesas electorales – en el mejor humor de los dominicanos – con los ofrecimientos de un “hombre enamorado”.

En un sondeo realizado por Acento, en la Universidad Autónoma de Santo Domingo, se preguntó a los participantes su opinión respecto a esta sonada comparación.

“El político, porque siempre habla y no cumple”, expresó Rosalina Anabel Pérez, estudiante de Bioanalisis de la casa de altos estudios.

Asimismo, Monaliza Nova afirmó que "el político siempre habla mentira, promete y al final del juego no cumple".

Opinión contraria tuvo Yorki Rosario, estudiante de Educación, quien afirmó que el hombre enamorado es más jablador “porque se inventa la cotorra rápido, pero el político la planea al paso, por pila de año”.