SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Miembros de diversos partidos políticos, así como representantes de la sociedad civil aseguraron que el país atraviesa un momento político crítico en el desarrollo democrático nacional, en momentos en que se ve sacudida por la corrupción y la impunidad.
Reunidos en durante la celebración del V Foro Político Social, afirmaron que el escándalo Odebrecht y la secuela de acciones ciudadanas de denuncia y protesta para que los culpables del reconocido soborno que esta empresa llevó a cabo en funcionarios y autoridades responsables de instituciones públicas y posiblemente de organismos como el Congreso Nacional mismo, ha puesto en evidencia el grave proceso de deslegitimación que vive el sistema político, sobre todo en lo que refiere al partido gobernante, pero también se ha puesto en evidencia la debilidad del sistema político en su conjunto, sobre todo del sistema de partidos.
Expresaron que esto se pone de manifiesto al apreciar el serio cuestionamiento que el movimiento verde ha planteado al orden estatal, a propósito del grave deterioro de las instituciones públicas y en particular del agrietado sistema de justicia, principalmente en materia de impunidad.
En esta perspectiva en la reunión relevó el tema de la cultura política como elemento clave para la permanencia y articulación de la impunidad como fenómeno de Estado y como realidad política, al tiempo que destacó la cuestión del papel de la corrupción, no solo en lo que refiere al deterioro de la vida institucional, sino como ponente de las lógicas de control y dominio del poder.
Para iniciar el debate la politóloga e investigadora social, Jacqueline Jiménez Polanco, presentó un análisis sobre los altos niveles de corrupción política en República Dominicana, profundizando en las características corporativas del accionar público actual, principalmente en la esfera del sistema de partidos en particular del partido gobernante.
Posteriormente, el sociólogo Enmanuel Castillo, director del Periódico La Información, puntualizó sobre el fenómeno de la corrupción asumido como un componente del poder político, principalmente en el giro corporativo que ha tomado la vida política en la esfera partidaria, en particular del partido gobernante.
Externó que la impunidad debe verse no solo en sus componentes judiciales y morales, debe reconocerse además como fenómeno político, es decir de poder, por medio del cual se definen mecanismos de dominio del poder político hacia la sociedad, al tiempo que se cohesiona a las élites políticas que controlan el poder.
Entre los participantes figuraron dirigentes de la sociedad civil, miembros de los partidos políticos, dirigentes sindicales, actores gubernamentales, académicos, empresarios, entre otros; quienes se enfocaron en discutir las implicaciones políticas y posibles recomendaciones de cara a esta entramada.