Puerto Príncipe, Haití (EFE).- La Misión de las Naciones Unidas en Apoyo de la Justicia en Haití (Minusjusth) afirmó este domingo que esta dispuesta a apoyar "soluciones pacíficas diseñadas por los haitianos para resolver la crisis política y aliviar el sufrimiento de la población".

La misión de la ONU, que abandonará el país el 15 de octubre próximo, expresó su profunda preocupación por el impacto de la prolongada crisis política sobre los haitianos, al tiempo que afirma que está atenta a las demandas de los distintos sectores de la sociedad.

Las soluciones pacíficas, según el comunicado, deben estar "de acuerdo con las normas democráticas y los principios de los derechos humanos".

El pasado viernes, durante una manifestación frente a la sede de las Naciones Unidas en Puerto Príncipe, una delegación opositora entregó a la misión una carta dirigida al secretario general de la ONU, António Guterres, en la cual pidió a la instituction quitar su respaldo al presidente hatiano, Jovenel Moise.

"El documento, firmado por siete senadores, tres diputados y dos alcaldes, fue enviado al representante especial del secretario general de las Naciones Unidas en Haití, así como a la oficina del secretario general en Nueva York", informó la misión.

La misión alentó a las autoridades, a los agentes de seguridad y a los ciudadanos a que se abstengan de cometer actos de violencia, garanticen el funcionamiento normal de las escuelas, los hospitales y los servicios de emergencia y permitan que los agentes humanitarios presten asistencia a las poblaciones más vulnerables.

Durante al menos tres semanas, la crisis sociopolítica y económica de Haití ha empeorado debido a la escasez de combustible, la inflación, la inseguridad, la depreciación de la divisa local, el gourde, y el aumento del costo de vida.

Las manifestaciones, a veces violentas, han sacudido el país desde el 16 de septiembre y paralizaron todo tipo de actividades públicas y privadas, así como el transporte público, el comercio y las escuelas.

Miles de personas han salido a las calles respondiendo a la llamada de organizaciones y partidos de la oposición, para exigir la salida del presidente Moise, citado en el informe del Tribunal de Cuentas sobre la dilapidación de los fondos del programa de ayuda venezolano Petrocaribe. EFE