SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El exmagistrado de la Junta Central Electoral, Eddy Olivares Ortega, llamó a los comunicadores a ejercer el rol que les corresponde como guardianes de la democracia, para garantizar el mantenimiento del Estado de derecho en el sistema de partido hegemónico que actualmente impera en la República Dominicana.
El destacado jurista dijo que frente a la falta de contrapeso que afecta la democracia dominicana, como consecuencia del control absoluto que tiene el hegemónico Partido de la Liberación Dominicana sobre los demás poderes del Estado y los órganos constitucionales, los medios de comunicación deben dar un paso al frente y convertirse en el contrapeso del poder omnímodo del presidente Danilo Medina.
Dijo que cuando el presidente Leonel Fernández, tres veces presidente e iniciador de la continuidad y hegemonía en el poder del Partido de la Liberación Dominicana, expresó la intención de ese partido de perpetuarse, a toda costa, en el poder hasta el 2044
En ese sentido, el extitular del órgano electoral dijo que en el actual gobierno de partido hegemónico todos los poderes y los extra poderes funcionan como si fueran un solo poder, lo que explica el hecho de que el Poder Legislativo, que debería ser el primer poder del Estado, haya sido copartícipe de la carrera desenfrenada de endeudamiento público que atenta contra el bienestar de la presente y las futuras generaciones dominicanas.
Agregó que si el Congreso Nacional fuera soberano, como manda la Constitución Política, le hubiera puesto freno al Poder Ejecutivo, en su alegre firma de préstamos altamente onerosos en contra de los mejores intereses de la nación.
Afirmó que esa es la consecuencia de que en la República Dominicana exista, en los hechos, un solo poder, que es el Ejecutivo.
Eddy Olivares habló ante un auditorio de comunicadores, al dictar la conferencia "Los medios de comunicación como guardianes en una democracia de partido hegemónico", la cual se celebró en el salón de Sesiones del Ayuntamiento Municipal de Mao, bajo el auspicio de la filial Valverde del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP).
Dijo que cuando el presidente Leonel Fernández, tres veces presidente e iniciador de la continuidad y hegemonía en el poder del Partido de la Liberación Dominicana, expresó la intención de ese partido de perpetuarse, a toda costa, en el poder hasta el 2044, en contra de la alternabilidad, que es uno de los valores de la democracia, debió ser un motivo, más que suficiente, para que se dispararan todas las alarmas, principalmente la de los guardianes de la democracia, los medios de comunicación.
Olivares consideró que el mantenimiento de un partido hegemónico en el poder afecta la calidad de la democracia por el distanciamiento de las instituciones públicas del Estado de Derecho, como consecuencia del deterioro progresivo de la institucionalidad política y de la administración pública.
Dijo que ante el progresivo deterioro de la institucionalidad es de suponerse que los grupos fácticos de la nación deben estar preocupados, principalmente los empresarios.
"Como una muestra de la degradación de la institucionalidad política tenemos el hecho de que a pesar de haber transcurrido casi siete años desde la proclamación de la Reforma Constitucional del 2010 aún no se ha modificado la Ley Orgánica Electoral ni aprobado la Ley de Partidos Políticos para darle concreción a la constitución política", expuso.
El ex magistrado de la JCE enfatizó en que el papel de los medios de comunicación es vital para que se pueda lograr la reforma de la Ley Electoral y de la Ley de Partidos Políticos.
Dijo que "la falta de alternancia afecta la democracia", y que por lo tanto es necesario que los comunicadores y los medios asuman su sagrada obligación de "guardianes celosos" en defensa de los mejores intereses del pueblo.
Concluyó que es peligroso para un país que un solo partido mantenga el control absoluto de todos los poderes y de todas las instituciones llamadas a crear leyes y a fiscalizar al propio Estado, por lo que considera que los periodistas deben servir como contrapeso del poder, que "en exceso termina por corromperlo todo".