Si estudiamos la historia del mundo, nos daremos cuenta fácilmente que los intereses económicos y el poder, en todas sus manifestaciones, es responsable de la mayoría de los conflictos. Dos guerras mundiales, y una inmensidad de situaciones bélicas y de destrucción de múltiples países en el discurrir de la historia, causadas por la angurria, el imperialismo y ese afán de explotación y control. 

Sabemos, que hay países con muchísimo más poder y dinero y países menos desarrollados, lo que evidentemente los coloca en situación de desventaja en ese juego geopolítico del poder. Estoy convencida de que lo que ha pasado y está pasando en Irak, Libia y Siria, esta intrínsecamente relacionado a su petróleo y no al deseo de instaurar “democracias”. Estos ejemplos de países al otro lado del mundo para con ello afirmar que bajo ningún concepto me parecería adecuado la intervención militar de un país en otro.

Dicho lo anterior, quisiera contextualizar una realidad: Venezuela inició con Chávez un período interesante, con el que podemos estar de acuerdo o no (sobre todo por los métodos a mi modo de ver populistas, por permitir que la inseguridad ciudadana siguiera creciendo y por la corrupción), pero que hay que reconocerle grandes méritos, hubo avances en políticas sociales, reducción de la pobreza, disminución de la mortalidad infantil, masificación de las universidades, erradicación del analfabetismo, y un avance significativo en los presupuestos de inversión social como salud y educación.

El período Maduro, trajo a Venezuela, además de la inseguridad que ya se vivía, una profundización de la crisis que se había iniciado con Chávez, la escasez de productos se convirtió en desabastecimiento cuasi absoluto, incluidos medicamentos. El gobierno “culpa” de la situación al bloqueo de los EEUU y a la intervención de las oligarquías nacionales, que están apostando al fracaso de la “revolución”; no niego que esto sea un componente importante de cualquier crisis, pero, quizás también deberían reconocer su incompetencia. Es mucho tiempo de desabastecimiento y, por ejemplo, el gobierno no ha sido capaz de negociar con sus aliados el envío de barcos cargados de mercancía para al menos hacer menos agobiante la situación, y si lo ha hecho, es en muy poca proporción. Así que alegar solamente “bloqueo y sabotaje económico” me parece muy cómodo, inconsecuente y de una incompetencia atroz.

Si usted como presidente, informa al mundo que desde hace mucho tiempo sus enemigos iniciaron estrategias para promover un “Golpe suave”, a través de provocar escasez de productos básicos y la especulación del dólar; y lo único que hace es quejarse y “culpar” a otros entiendo que hay que revisar si se tienen las competencias y la capacidad para dirigir un Estado.

Maduro afirma, que está en el “lugar correcto de la historia”, yo lo dudo. Y que los EE UU, lo único que quieren es el petróleo de Venezuela, sobre esto no tengo dudas, claro que es así, además de que, si con su vocación imperial nunca han tenido legitimidad, con el presidente que tienen ahora, menos; ahora bien ¿será que Rusia y China no buscan lo mismo?

Si el presidente de la RD, estuviera reprimiendo movilizaciones de protestas y dejando cientos de heridos y muertos; si hubiese adolescentes presos por participar en protestas populares; si se celebraron unas elecciones y la oposición gana mayoría calificada en la Asamblea Nacional,  y de inmediato el Presidente nombra un Poder Judicial a dedo, que se abroga funciones legislativas y arrebata las funciones al parlamento que le es contrario; si no acepta organizar un referéndum revocatorio contemplado en la Constitución y adelanta unas elecciones siete meses (al mejor estilo el Balaguer de los 12 años) porque en ese momento quienes pueden ser los candidatos de la oposición estan inhabilitados, apresados o exiliados; si participó en un proceso de negociación y diálogo y se burló de los mediadores y de la otra parte; si miles y miles de ciudadanos y ciudadanas emigran diariamente, porque no aguantan la situación y si, además, escoge a “su gusto” una Asamblea Nacional Constituyente cuya primera medida es la destitución de la Fiscal General, porque había informado que iniciaría una investigación sobre procesos eleccionarios. Estoy absolutamente segura, que hasta las personas que en este país están diciendo que Maduro es presidente legítimo estuviesen gritando, protestando y organizando escritos ante Naciones Unidas, para exigir restitución del orden constitucional. 

¿Que apoyamos?

¿Intervención? ¿Guerra civil? CLARO QUE NO.

Evidentemente a estas alturas ya todo el mundo debería tener claro que con Maduro no hay solución, que Venezuela necesita un gobierno de transición que organice elecciones legitimas y libres y que pueda abocarse a un proceso de reconstrucción.

Ya lo sabemos, es el país que tiene la mayor reserva petrolera del mundo, es RICO, así que se merecería vivir en prosperidad, salud, sosiego, paz, abundancia y desarrollo.

¿Puede lograrlo solo?  No lo sé… Yo apuesto al multilateralismo, para que tanta gente que tuvo que emigrar por hambre o por persecución política, pueda retornar a construir el país que se merecen.

Tanta riqueza desde siempre tan mal administrada, espero que esta crisis les haga resurgir como lo que son UNA GRAN Nación.