Nuestra ciudad colonial alberga, en la calle Salomé Ureña, la Fundación América Cristoforo Colombo-Amerigo Vespucci, que se presenta como un espacio multicultural abierto a la comunidad, y que funciona en base al voluntariado, de manera totalmente desinteresada.

Su misión es “aportar conocimiento e integración entre todos los países del continente americano a través de la cultura, con programas y actividades de intercambios educativos, culturales, artísticos y sociales. Fomentar los valores de libertad, paz, justicia, dignidad y respeto”.

Incluye igualmente, “países de Europa, África y Asia que, de una manera u otra, han contribuido a la formación del nuevo mundo. Fundamental es mantener vivas las grandes culturas y civilizaciones existentes en este maravilloso continente, anteriores a la colonización".

La Fundación ha montado exposiciones de artistas locales, realizado bazares, y sirve de casa para artistas extranjeros que han venido a realizar residencias en el país. El edificio es un casa-museo con artefactos de todos los países que Piero, su fundador, ha recolectado durante sus viajes alrededor del mundo.

Es también un espacio que está democratizando el acceso a la cultura, tanto para el público (generalmente sus conciertos, exhibiciones, conferencias y talleres son gratis), como para los creadores (cualquiera puede montar un evento en sus salones, y si la entrada es gratis no se paga nada a la Fundación). Si se trata de un evento con cover, sólo hay que aportar un pequeño monto.

La institución ofrece desde hace varios años noches de conversación en diferentes idiomas sobre la base del voluntariado, sea en inglés, italiano, portugués o español. Se trata de dos horas semanales de conversación libre y gratuita en cada lengua.

La Fundación tiene también en proyecto impartir clases de kreyol y hacer un catálogo de las lenguas indígenas habladas en nuestro hemisferio. 

Los miércoles, de 7.00 a 9.00 PM, el “Club de Inglés” agrupa hasta 25 personas interesadas en mejorar sus niveles lingüísticos y profundizar en temas de interés, los cuales pueden ser bastante polémicos como, por ejemplo, la pertinencia de la lectura de la Biblia en las escuelas, los derechos transgéneros, o las relaciones dominico haitianas.

La Fundación América está haciendo un gran trabajo para promover los aportes culturales de Haití y promover el diálogo intercultural. Hay varios grupos haitianos que utilizan sus salones para hacer reuniones, y la Fundación está organizando un tour de Haití para mejorar el conocimiento mutuo de dominicanos y haitianos.

Es inspirador ver que cada semana personas de todas las edades, de diverso perfil (artistas, obreros, militares, abogados, agentes de centros de llamadas, entre otros), vienen a hablar de sus experiencias, mejorar su manejo de otro idioma y profundizar en temas de importancia social.

Acuden de igual manera personas de otras partes del mundo (México, Irlanda, Australia, Japón, etc.), que regularmente ofrecen charlas sobre sus culturas respectivas.

Las actividades del Club de Inglés demuestran que es posible sostener debates y diálogos de forma cortés, y promover la empatía, aunque todos los participantes no estén de acuerdo sobre todos los temas.

Angie Neslin, graduada de Columbia University y moderadora de los debates en inglés, nos dice: “me doy cuenta más y más de lo enriquecedor que ha sido el Club para mí en el plano personal, y según los comentarios de otros participantes creo que ha sido lo mismo para las más o menos 100 personas que han pasado por estos encuentros en los dos años y medio que llevo moderando los debates en inglés”.

Muchos integrantes han testimoniado que no solo han progresado en su nivel de idioma, sino que han aprendido a interactuar con gente de culturas diferentes.

“El pasado otoño volvió un chico que hace un año asistía con mucha regularidad, y nos contó que él se había integrado en el club no tanto para mejorar su inglés, sino para ponerse más cómodo interactuando con personas de diferentes culturas. Nos dijo que, gracias al club, había logrado eso y ahora tiene un trabajo donde está colaborando mucho con personas de otras partes del mundo y acredita a su experiencia en el Club de Inglés por haberle preparado para eso”, nos refiere Neslin.

Leury Mella, otra integrante del Club expresa que estos encuentros “brindan la oportunidad de reforzar conocimientos y cultivar relaciones con la lengua y la cultura; algunas personas han podido conseguir trabajos por eso, y otras han podido aprender algo nuevo y conocer a personas diferentes”.

Piero Aloini, el anfitrión del lugar e ideólogo de la Fundación, habla siete idiomas. Se desempeñó como manager de barcos de cruceros y así llegó a conocer gran parte del mundo. De esos viajes ha traído las piezas expuestas en la casa-museo. Al llegar al país trabajó en el comienzo del turismo en Bayahibe.

En momentos en que empiezan a resurgir los nacionalismos y los integrismos, que los migrantes y refugiados focalizan el miedo de sociedades que se encierran en sí mismas y que el odio al otro es de una sorprendente actualidad, deberían florecer más espacios de convivencia, debates y tolerancia como este.

Si deseas conocer otros puntos de vista u otras historias, si deseas compartir una obra creativa con una comunidad más grande, o si simplemente deseas visitar una casa encantadora en la Ciudad Colonial, la Fundación América tiene sus puertas abiertas a todos los ciudadanos del mundo.