1-) Observación Presidencial al Código Procesal Penal.

El presidente Danilo Medina tomo una decisión valiente al observar y devolver al Congreso el Código Procesal Penal, del cual observo los artículos 107 al 110 que tratan los aspectos de la ley relacionados con la interrupción del embarazo y su tipificación penal. La observación presidencial no despenaliza el aborto, solo introduce tres condiciones  que son consideradas casos excepcionales como cuando esta en riesgo la vida de la mujer, en casos de violación o incesto, o cuando el feto tenga malformaciones incompatibles con la vida.

Estas observaciones del Poder Ejecutivo han sido bestialmente rechazadas por las Iglesias dominicanas que no han tomado en consideración aspectos fundamentales y de ciencia en su rechazo a estas excepciones en la penalización del aborto en las leyes dominicanas, por que es injusto e inmoral el querer obligar a una mujer a arriesgar su vida antes que proceder a interrumpir un embarazo que podría matarla. Yo, que soy padre de cuatro hembras afirmo, sin menoscabo de mis convicciones católicas, que no habría poder divino ni humano sobre la tierra que me haga poner en riesgo la vida de una de mis hijas si afrontara uno cualesquiera de los casos observados por el Ejecutivo.

Habría que vivir el calvario por el que pasan las mujeres cuyos hijos nacen con malformaciones o enfermedades que lo mantienen postrados el tiempo que puedan sobrevivir, si a eso se le puede llamar vivir, o el trauma que afrontan en los casos de violaciones o de incesto. En fin, que aquí se debaten todas las consideraciones legales, religiosas y de ciencia, pero no se toma en cuenta la opinión que debe ser la mas importante, la de la mujer que pasa por uno cualesquiera de estos trances, porque las observaciones hechas por el presidente Medina no serian un mandato obligatorio en ninguno de los casos, solo elimina la carga penal que conllevan, la decisión final debe recaer sobre quien sufrirá durante toda su vida las consecuencias de su decisión, sobre la mujer.

2-) Quejas del Gobierno Haitiano contra el Plan Nacional de Regulación de Extranjeros.

El embajador de Haití en nuestro país ha externado públicamente la queja de su gobierno sobre la lentitud con que marcha el Plan Nacional de Regularización de Extranjeros, atribuyendo dicha lentitud a las trabas que se le ponen a los solicitantes.

El diplomático haitiano se queja de que sus compatriotas no pueden obtener certificaciones de alquiler de viviendas, o de que sus jefes no quieren firmarles su constancia de trabajo, aunque admite que su gobierno no ha podido entregar la documentación requerida a sus nacionales con la rapidez que estos demandan.

No será que el experimentado diplomático y su gobierno pretenden que el gobierno dominicano exima a los haitianos de los requisitos que la ley les exige para tapar sus propias faltas, o para que no pueda haber distinción entre los que llevan años residiendo en nuestro país y los de reciente ingreso?

Claro que esta queja vino acompañada del pedido de extensión de la fecha limite para que los extranjeros puedan acogerse a dicho plan, que seria en este caso una segunda extensión ya que recientemente este plazo se extendió por noventa días. El gobierno dominicano no debe seguir a expensas del juego de los haitianos y debe respetar la ley y terminar el plan en las fechas ya aprobadas, ah y de paso, por Dios, vigilen esa frontera que los haitianos están llegando en masas alentados por su propio gobierno.

3-) El Pedido de Leonel Fernández para que se aumenten los impuestos.

El ex presidente Leonel Fernández tiene lo que llamamos los dominicanos una cachaza bien grande, porque después de que el   Congreso Nacional, dominado por su Partido, le aprobara alrededor de 10 reformas fiscales que aumentaron la presión fiscal sobre la población y los sectores productivos, tiene la cara dura de pedir mas impuestos argumentando que el gobierno no puede hacer frente a sus gastos.

En eso coincidimos con el Dr. Fernández, pues ningún gobierno derrochador, corrupto e inepto como los que el ha presidido puede afrontar las demandas de la población si usa los recursos recaudados en pagar a un ejercito de parásitos morados a través de nominillas, si sobrevaluan exorbitantemente las obras publicas y se llevan en los bolsillos lo que sobra después de pagar una deuda exorbitante que han acumulado en base a llevar el presupuesto de la Nación de 26,000 millones en 1996 a mas de 660,000 para el próximo año, todo esto fríamente calculado para instaurar una hipercorrupcion.

Me luce que con esas declaraciones el Dr. Fernandez trata también de justificar el enorme déficit fiscal de 200 mil millones en que nos metió para satisfacer su ego y proyectar su vuelta al poder. Pero también con esas mismas declaraciones nos deja ver a los dominicanos que un nuevo gobierno peledeista volvería a traernos su vieja receta de mas impuestos, mas deuda, mas gastos en botellas, mas sobrevaluación de obras, mas corrupción y la misma ineptitud con que nos ha gobernado el Partido de la Liberación Dominicana.

Ya estamos advertidos, de todos nosotros depende evitar que esto siga repitiéndose.