Valorar en serio la movilidad, implica conocer la complejidad del problema. De un total de 650 km lineales de longitud de vías que había en 1998, se pasó a 1,443 km en 2008 y a más de 2,200 km en este año 2019. Igualmente en 1999 se registraban unos 44,000 vehículos, en el 2009 121,000 a nivel municipal. Hoy el parque vehicular supera los 300 mil vehículos, con más 150-200 mil unidades que arriban a diario a la ciudad. Las motocicletas alcanzan las 120 mil unidades. Lo mismo acontece con la cantidad de buses, minibuses, conchos, taxis y motoconchos que se multiplicaron por 10. Incrementos de más del 150%. Otro tanto acontece con los accidentes. Resolver la movilidad es tarea integral. En todo este contexto, la actual gestión del Ayuntamiento ha impacto positivamente.
Primer Avance de Movilidad: Santiago desarrolló exitosamente una central de mando y tránsito, que hoy permite monitorear el tránsito en diversos puntos. Una estructura puesta en operación incluso antes que el Sistema 9-1-1 funcionara en Santiago. Una central que aporta información clave de movilidad y seguridad. La próxima tarea será ampliar la cobertura de las cámaras de esta central, incorporar la Dirección General de Seguridad del Transito y Transporte Terrestre (DIGESETT) y articular un programa común con el sistema emergencia y seguridad de Santiago 9-1-1. Sólo Santiago, de 158 municipios tiene una unidad de dirección en tiempo real con estas características.
Segundo Avance de Movilidad: Orden y ley con una nueva policía municipal. Pocos recuerdan lo que hacía la Policía Municipal antes que Abel Martínez con el apoyo del Coronel Sergio Victoria cambiara para bien, el curso de este organismo. Calidad de uniformes, juventud de los miembros, capacidad física y atlética, equipamiento y observancia de normas superó hasta los organismos de la Policía Nacional existentes. Después que este grupo de cuidadores del orden hicieron lo que deben hacer, vinieron las quejas por algunos excesos entendibles. Sin embargo, el desorden municipal, el parqueo en aceras, conchos caóticos, vertederos irregulares y ocupación del espacio público, han tenido su “némesis”. Estos policías aplicaron una coerción retributiva, apoyo al orden y desagravio a la ley. Han sido la debida compensación de Santiago contra el desorden. Hoy contamos con un brazo ejecutor del lema “es tiempo de vivir en orden”. Santiago pide excusas por los excesos y se compromete a arreglarlos con educación en el camino.
Tercer Avance de Movilidad: Se ha logrado una recuperación generalizada de todos los semáforos. No podemos olvidar que la mayoría de los semáforos de Santiago estaban destartalados y descompuestos. Hoy el sistema se ha modernizado. Todos tienen sus luces encendidas, están pintados y se han colocado nuevas unidades. El Alcalde, apoyado por el profesor de matemáticas José Manuel Sosa Villalona, director de Tránsito y Transporte y la ingeniera Paola Jansen, gerente de iluminación han hecho mucho. Para aportar eficiencia al tránsito casi todas vías primarias han sido cronometradas con la metodología “olitas verdes”. Las anomalías del sistema eléctrico alteran en tiempo y espacio, la lógica de las luces, pero el trabajo está hecho y cada día mejora.
Cuarto Avance de Movilidad: estricto control de los vehículos pesados. La ordenanza 3169-17 y un sistema de autorización para transitar vehículos pesados son la evidencia. Se ha iniciado por primera vez, el control del peligroso y taponante tránsito de vehículos de carga sobre todo después de la construcción de la Avenida Circunvalación Norte. Santiago registra 61,131 vehículos pesados que deben cumplir la normativa y registrarse en el sistema que dispone el Ayuntamiento. Hoy la reducción de los vehículos de carga en el centro se ha reducido drásticamente y la avenida circunvalación norte, comienza a cumplir la misión estratégica para lo que construida: facilitar el tránsito hacia las provincias de la costa y de la frontera con Haití.
Quinto Avance de Movilidad: una amplia señalización vial se ha desplegado. La ciudad se observa señalizada y pintada en zonas de riesgos. No es sólo que se señaliza sino que se da mantenimiento. Este enfoque ha permitido pensar en el bosquejo integral de una Nueva Nomenclatura Urbana que será un instrumento preciso de numeración domiciliaria para designar establecimientos, viviendas y vías. Se superará el viejo sistema personalizado por uno de calidad y homologación global de asignación de nombres de vías y numeración de propiedades y solares en la ciudad, distritos municipales. Esta iniciativa de ordenamiento creará una nomenclatura moderna que aportará a la competitividad, contribuirá a la eficiencia comercial, accesibilidad de emergencias, seguridad y recaudo de arbitrios municipales.
Sexto Avance de Movilidad: una nueva gobernabilidad de la movilidad con participación de las Empresas-Sindicatos del transporte. El relacionamiento de Alcaldía con empresas del transporte con sus esperados conflictos se mantiene estable. Un decálogo de decencia del transporte público se ha firmado y los choferes tienen la confianza que no habrá un nuevo “Festival de Franjas” o permisos de circulación otorgados en masa a sectores interesados. Menos aún se pretenderá construir trenes o desplegar buses colectivos, sin su activa participación y consulta. Ayuntamiento y Federaciones del transporte se comprometen a facilitar la toma de decisiones necesarias para crear un verdadero sistema de movilidad integral, así como a promover la capacitación permanente en la nueva ley 63-17 y otras normativas municipales que se están formulando.
Séptimo Avance de Movilidad: Santiago tiene un nuevo Plan de Movilidad Urbana Integral (PIMUS) formulado primero que el plan similar que tiene el INTRANT. Ningún municipio posee esta herramienta que se ha consolidado con el mapeo del transporte público ejecutado por la Alcaldía, CDES, PUCMM y BID. Nuestro PIMUS Implica una inversión de US$ 603,314,107.00. La Alcaldía y CDES hacen gestiones para la consecución gradual de estos fondos en coordinación con el Ministerio de la Presidencia y BID. Las propuestas y productos entregables son: i) Programa de construcción de vías y gestión del tránsito; ii) Nuevo Transporte Público Colectivo de 380 buses de 60-70 pasajeros, iii) Estrategia de Movilidad en Bicicleta; iv) Puntos desarrollo urbano orientados al transporte (paradas), v) Programa de eficiencia de los vehículos de carga; vi) Sistema de seguridad vial; viii) Estacionamiento regulados y ix) Gestión de la institucionalidad y legislación para reestructurar el Consejo de transito, tranporte y movilidad urbana de Santiago.
Estos avances son las acciones de victoria rápida que aporta Santiago para estar potable como ciudad para la introducción de grandes acciones diseñadas y que ya comienzan a llegar.