El Banco Central y el Ministerio de Hacienda acaban de anunciar con bombos y platillos las cifras finales sobre el PIB en el 2019. El crecimiento alcanzó un 5.1% después de un primer semestre donde registró un 4.7%, mostrando una fuerte contracción si consideramos que en el 2018 el crecimiento fue de 7% del PIB.

La construcción y los servicios financieros fueron los que dieron el impulso final para alcanzar la cifra señalada ya que la manufactura, zonas francas, turismo, comercio, crecieron menos que en el 2018. Y hablando de la construcción esta es mayormente impulsada por el lavado de activo.

Las medidas monetarias adoptadas por el BRCD a mediados del año pasado frenaron esa tendencia decreciente del crecimiento y la economía repuntó en el segundo semestre. 

La Inflación cerró por debajo de la meta del 4% aunque se triplico respecto al 2018 y la devaluación del tipo de cambio fue de 5.1% el doble de la registrada en el 2018.

También se habló de la inversión externa neta que repuntó respecto al 2018 cerrando en alrededor de US$3 Mil millones.

El sector externo, sin embargo, fue neutro ya que los ingresos por remesas subieron bastante, pero los de turismo se redujeron casi en la misma proporción.

El déficit de la cuenta corriente de la balanza de pagos cerró en 1.4% del PIB casi igual al 2018 y el déficit de la balanza comercial fue de unos US$9,500 millones algo más de U$$300 millones por encima del 2018.

Todo presentado muy bonito para ser el peor año del gobierno de Danilo Medina en términos económicos.

¿Pero por qué no hablan nada de lo malo, de lo que se le oculta al ciudadano para que confíe en que la estabilidad macroeconómica está garantizada?

Saquemos del escondite algunas de estas pequeñas cosas para que dejemos de soñar.

  1. En términos de la deuda pública consolidada, nuestro país se ubica entre los 3 más endeudados respecto al PIB en América Latina y el Caribe. Entre el 2012 al 2019 el aumento de la deuda ha ido descabellado, pasando de unos US$12 mil millones a US$34.3 mil millones (300%). La del Banco Central aumentó de 270% pasando de RD$254 mil millones a RD$600 mil millones.   
  2. También es el segundo país que paga el porcentaje más alto de sus ingresos tributarios (23%) para cubrir los intereses de la deuda.
  3. En cuanto al área fiscal, desde el 2010 al 2019, el déficit fiscal del SPNF ha aumentado en términos nominales RD$980 mil millones (US$23 mil millones calculado base anual), representando en términos ponderados un 22% del PIB.
  4. La mala calidad del gasto público esta entre las peores de América Latina donde el nivel de corrupción es de los más altos del mundo y el tercero más alto en América Latina y el Caribe. El resultado PISA es el mejor ejemplo de cómo el dinero se malgasta en una burocracia hipertrofiada y derrochadora.
  5. El gobierno dominicano se ha caracterizado por frenar durante 7 años todo tipo de reforma institucional. El quehacer público está contaminado y podrido por el soborno, el tráfico de influencia, el nepotismo y el incumplimiento de las leyes sobre compras y contrataciones del Estado, entre otras muchas.
  6. El país tiene una nómina publica de 750 mil empleados. Para muestra un botón. Chile tienen 756 mil kilometro cuadrados, una población de 19 millones de habitantes (2018) y emplea en el Ministerio de Agricultura 6070 empleados fijos. República Dominicana es 14 veces más pequeña, con la mitad de la población y un PIB agropecuaria 20 veces menor, tiene una nómina en el Ministerio de Agricultura de 7,600 empleados fijos y una cantidad indeterminada de nominillas y personal con contrato temporal. Y así sucede en cada Ministerio o entidad autónoma del gobierno.
  7. El crecimiento del empleo es otro mito. El 87% de los empleos creados en los últimos 7 años han sido absorbido por el sector informal de la economía, que emplea el 54% de la mano de obra, y por el gobierno. El sector formal que mayor impacta en el crecimiento casi no crea empleos como la minería, las telecomunicaciones y el sector financiero. En la construcción, en la agricultura y en muchos servicios, la mano de obra contratada es mayormente de origen haitiano, que no tienen residencia legal en el país.
  8. Finalmente, ¿cómo puede un país decir que la pobreza se ha reducido a un 23% cuando un 28% de los hogares no tienen agua potable ni electricidad? Solo en este país se ven esas cosas.

Esa es la verdadera Republica donde vivimos no la que quiere pintar con bellos colores un Gobierno a todas luces inoperante y corrupto.