Robaron mucho—minerales, joyas,

seda, cuadros, algodón—demasiado.

Dejaron tristeza, dolor, furia,

y un ferrocarril, una economía

nacional, un idioma. Dejaron

sangre, bebés, variaciones

en líneas biológicas. Dejaron

este poema en el espíritu

de un chico nacido justo después

de que hicieron sus maletas

y los mandaron a volar.

Indran Amirthanayagam