El país se ha convertido en un destino turístico por excelencia en toda la región del Caribe. Las cifras recientes confirman una tendencia de incremento que se perfila desde hace varios años, gracias a un grupo de profesionales que labora con dedicación en el Ministerio de Turismo y de manera conjunta con la Asociación Nacional de Hoteles y Restaurantes, el Centro Especializado de Seguridad Turística, y otras instituciones privadas cuyo objetivo es alcanzar para el próximo año la llegada de diez millones de turistas a la República Dominicana.

La República Dominicana recibió 5.016.106 visitantes extranjeros y dominicanos no residentes en los en los primeros once meses del año, una cifra récord que supera en 409.059 viajeros la del mismo período de 2014. De este incremento, el 80,1 % corresponde a turistas extranjeros (327.666 pasajeros) y el 19,9 % restante a dominicanos residentes en el exterior (81.393 pasajeros), según el último Informe sobre el Flujo Turístico publicado por el Banco Central dominicano, que señala que el país espera cerrar el año con 5.600.000 turistas.

En noviembre de 2015 llegaron por vía aérea un total de 423.252 pasajeros no residentes, incluyendo extranjeros y dominicanos, lo que arroja un crecimiento interanual de 7,9 %, que en términos absolutos equivale a 30.969 visitantes adicionales con respecto a igual mes del año 2014.

Los especialistas en el tema aseguran que el número total de turistas que visitará el país superará con más de dos digito a las de otras naciones de la región, debido a los resultados relevantes que la industria refleja, a medida que el turismo dominicano se diversifica con una serie de variables de interés para el visitante que superan la clásica oferta de playas, arena, gastronomía y bebidas.

El Banco Central precisa que el 51,7 % de los visitantes de los once primeros meses del año llegó de América del Norte, el 27 % de Europa, el 16,4 % de Sudamérica, el 4,5 % de América Central y El Caribe y 0,4 % de Asia y el resto del mundo

Se estima que la visita de turistas a la República Dominicana cerrará este año con cifras récord, o un incremento de 10 por ciento, equivalente a 65-mil visitantes por encima de los 5-millones de 2014, a través de los ocho aeropuertos internacionales, sumado a una serie de proyectos entre ellos dos nuevos hoteles, un centro de Convenciones en el Gran Santo Domingo que resulte técnico, sostenible, dinámico, asequible y sabroso.

¿Pero qué hace posible esa gran realidad que muchos se niegan a reconocer? Son varios los factores. Uno de ellos es el hecho de que sólo en la Capital dominicana haya salones con capacidad para reunir a mil-600 personas, más de 20 marcas de hoteles, una zona histórica colonial remozada, una ciudad con más de 4-mil habitaciones, con opciones de campos de golf a nivel mundial, deportes extremos, festivales gastronómicos, de cultura, cine y teatro, entre otras opciones familiares, en un lugar que figura entre diez destinos culturales declarados por la Unesco.

El Banco Central precisa que el 51,7 % de los visitantes de los once primeros meses del año llegó de América del Norte, el 27 % de Europa, el 16,4 % de Sudamérica, el 4,5 % de América Central y El Caribe y 0,4 % de Asia y el resto del mundo. Dichos turistas exploran el país por dentro con el disfrute del turismo ecológico, natural, senderismo, la riqueza hidrográfica nacional, lo mismo en el Cibao que en Boca de Yuma, Samaná o Yamasá, Maimón, Punta Cana o Bahía de las Águilas.

Datos del MITUR sugieren que ningún polo turístico de la región del Caribe –incluidos Puerto Rico, San Martin, Saint Thomas, Aruba, Dominica, Gran Cayman, Cancún o Cuba, entre otros—disponen de los servicios de 354 líneas aéreas, 49 de ellas regulares como es en la República Dominicana, donde seis aeropuertos operan a plena capacidad, entre ellos Punta Cana, el AILA, y Puerto Plata; 69-mil-415 habitaciones disponibles en total y un 80 por ciento de ocupación hotelera en la temporada de septiembre de 2015. Además, un tráfico aéreo de pasajeros que aumentó a 11.3 millones el pasado año, con un alza de 1.5 por ciento, y de 5.5 a 9.3 por ciento en años previos, todo gracias a la política de cielos abiertos de las autoridades nacionales.

¿Y qué decir de los puertos turísticos? El puerto de Sans Soucí conecta con Estados Unidos, Europa y Sudamérica. Sólo en Santo Domingo operan 36 excursiones diarias a diez destinos culturales locales. Ello no incluye los recursos naturales en el interior de país, muchos de ellos aún vírgenes como Cayo Arena, en la bahía de Ensenada, en la costa norte del país, o el centro ecológico de La Ventana y el Club Hacienda Campo Verde, en la cordillera del Cibao.

Para concluir, cabe preguntar: ¿por qué regresan los turistas a la República Dominicana? La realidad lo confirma más allá de las frías estadísticas: por la nobleza y el calor humano que tienen los dominicanos. Y es que como afirmara un poeta, “para amar un país hay que conocerlo. Y para sentirse orgulloso de él, es preciso percibirlo como uno lleno de gente buena y valiosa.”