Conversando de política en estos días ¿quién no ha escuchado el simple argumento la política lo enreda todo?
Sin embargo, nuestro análisis lógico está llamado a desenredar el bollo en que nos meten algunos con sus argucias y sostenimiento oculto de ventajas que le oferta quien se encuentra en el poder con sus obscuras decisiones de corte económica y la táctica de sumar votos.
No es que sea criticable buscar votos porque esa es la estrategia de campaña de los candidatos políticos, pero ejerciendo con valores su propósito sin perjuicio de los demás.
Pero en estos momentos es la Junta Central Electoral, encabezada por el Dr Roberto Rosario, que se niega ante los pedidos de transparencia del proceso electoral por parte de la sociedad civil y los partidos de oposición, cuando ese es su rol frente a la sociedad dominicana de poner a funcionar la democracia y garantizar la equidad del certamen para que no haya escepticismo ni suspicacias por los contendientes.
¿Por qué se resiste a contar los votos en los Colegios Electorales o la muestra manual del 15 por ciento recién resolutada, tal como lo prescribe el artículo 126 de la Ley Electoral , que obliga al conteo manual, sin rechazar el escaneo?
¿Cuál es el misterio que abriga un juez administrador, si son los partidos los que justifican y son el leif motiv de la gobernanza democrática?
Nadie entiende, a menos que no sea el PLD y sus aliados, que salen como corifeos en la defensa de las decisiones y de la actitud cómoda de que fue un eminente miembro del Comité Central de esa organización en el pasado hasta su designación de Juez en la Junta, y ese hecho da motivo a la duda cartesiana.
¿Cómo es posible que un Presidente de la Junta polemice con Participación Ciudadana, que lo que hace es colaborar con el proceso, y entre en un dime y diretes con el embajador estadounidense?
Nadie entiende, a menos que no sea el PLD y sus aliados, que salen como corifeos en la defensa de las decisiones y de la actitud cómoda de que fue un eminente miembro del Comité Central de esa organización en el pasado hasta su designación de Juez en la Junta, y ese hecho da motivo a la duda cartesiana.
Por cierto que se ha desvirtuado lo declarado por PC y por el embajador James Brewster, de la misma forma que acostumbra el PLD, porque lo cierto es que ninguno ha solicitado meterse en conteos de votos, sino que se permita la observación del proceso, porque saben de la inequidad que persiste en las cuestiones fundamentales y técnicas de la administración. No se busca complacer a los partidos en desventaja, y no se pide más que la aplicación de la Ley.
¿Qué importa perder algunas horas, en aras de la transparencia y un escrutinio limpio?
La democracia cuesta mucho para evitar crisis como la del 1994, donde se demostró el fraude contra el candidato Dr José Francisco Peña Gómez luego de tanta gente negarlo.
¿Por qué esa coincidencia con el partido de Gobierno, que no quiere el conteo manual paralelo en el seno del Colegio Electoral, que es soberano en administrar esos procesos?
Las Juntas Municipales y Distritales son partes del órgano central e incluso no tienen capacidad de locales y energía, sería un tollo. Además la auditoría la debe realiza un tercero para que exista confianza en los resultados. Todavía al día viernes 29 no se habían entregado los padrones, sino el CD. Y hay quienes piensan que los peledeístas ya lo poseen.
Los delegados y miembros de la Mesa Electoral confían que sus reales resultados sean comparados con el conteo electrónico enviado a la Junta. ¿Y cuál es el problema, si sólo un bloque político aplaude y secunda su propuesta, no así los funcionarios de la sociedad civil y partidos de la oposición, que presenta ciertos matices de incredulidad? Revise y ponga las cartas en la mesa.
Dicho estos argumentos paso a reclamar a los partidos de oposición que aprendan de la historia y provoquen de inmediato un frente común para defender el voto transparente ante la Junta Central Electoral y las mesas electorales, como en la parte técnica. Acuérdense que aquí hay una empresa española que produjo un escándalo en Puerto Rico en el tema electoral, dirigió ciertas funciones de gerencia y supervisión en Brasil y Venezuela. Ella además tiene contratos de operación tecnológica con la Junta Central, contrato con CDEEE y la Oficina de Obras y del Estado. Ha sido beneficiada por el Gobierno, y por tanto hay compromisos fuertes.
Soy muy crítico en apoyo a la democracia y transparencia de este desigual proceso electoral. No creo en el uso único del escaneo y el software programado para disparar en uno o dos por ciento en horas masivas de concurrencia la votación en favor de un candidato presidencial en conteo tecnológico.
Esa es la impertinente duda que asaltan a muchos opositores y es una responsabilidad ética por la democracia que ha de atenderse con presteza, sin demora. Más aún cuando conocemos la máxima: "el poder absoluto, corrompe absolutamente". Esto lo observamos a diario en el asalto abusador y contrario a todo equilibrio social por parte de los reeleccionistas peledianos.
¿Comprende usted, Dr. Roberto Rosario? ¿Entonces por qué le responde con rostro de molestia a los requerimientos de los no peledeístas?