Todos los males acumulados como producto de los malos gobiernos en el país se han conjugado para crear la más grande y formidable reacción popular en contra de un gobierno y un partido en toda la historia de la República Dominicana. Un joven empresario y político, inspirado en nobles ideales y valores familiares, cívicos y patrióticos, se ha decidido a acompañar a su pueblo en uno de los más difíciles desafíos que ha tenido que enfrentar el país después de la salida de la dictadura de Trujillo: enfrentar la maquinaria estatal y al grupo político más ambicioso y despiadado que ha tenido -y tiene- nuestro país, con absoluto control partidario sobre todas las instituciones de la nación. El PLD estableció un régimen dictatorial adaptado a los nuevos tiempos. Y como ocurre en casi todos los procesos históricos, la mayoría del país lo advirtió muchos años después, no tarde. Por eso, perderán las elecciones.

En las grandes luchas sociales del país de los últimos años, como el 4% para la educación, Loma Miranda y en la Marcha Verde, Luis Abinader estuvo allí acompañando a su pueblo, convencido de su rol como joven líder político y reafirmando su pasado histórico y familiar en la lucha por la democracia verdadera. La lucha del Dr. José Rafael Abinader, su padre, quien estuvo como secretario de Finanzas del gobierno constitucional en la Revolución de Abril del 65, luchando por la constitucionalidad democrática; luego, fue Vicerrector Administrativo de la UASD y miembro del Movimiento Renovador Universitario, que abrió las puertas de la Universidad al pueblo. Posteriormente, fue uno de los más altos funcionarios del Estado, siendo uno de los hombres de más convicciones morales, éticas y patrióticas; estuvo siempre altamente comprometido con su país. Esta historia ha debido acompañar, en pensamiento y alma, en la ruta de esta difícil batalla a este joven político, que en la próxima semana será elegido como el nuevo presidente de nuestro país.

El PRM es un partido nuevo que en tiempo récord instala un gobierno propio con arraigo y apoyo popular. Nuevo es el líder de ese partido que asumirá la Presidencia de la República en los próximos días. Nuevo es el presidente del partido, José Ignacio Paliza, que vive en la provincia de Puerto Plata; y quien rompe con la tradición de la política burocrática que ha mantenido, reservada en la historia partidaria, la presidencia de los partidos políticos para aquellos ciudadanos y ciudadanas que viven o residen en el polígono central de la capital del país. Esto también es nuevo. El PRM ha sintetizado y ha asumido, con mucha inteligencia, coraje y patriotismo la lucha del pueblo contra el secuestro de la democracia.

Pero vieja es la esperanza del pueblo que pone y cifra todos sus anhelos en el nuevo horizonte del gobierno que se instalará en menos de cuarenticinco días. ¡Qúe reto más grande para un líder joven!