A veces a uno se le olvida que desde los tiempos de Belisario Peguero (¿será éste Peguero familia de aquél?), la Policía Nacional es un partido político con todos sus atributos: comités de base en pueblos y barrios; comités intermedios en cada departamentos; un Comité Central en la Plana Mayor y un Comité Político integrado por los generales en turno. Como en todo partido, hay mafias y tendencias, y abundan trampas y conspiraciones, codazos y patadas no siempre discretas. Y, además, sus fuerzas internas se alternan o son compensadas…Por ejemplo, ahora Leonel Fernández logró imponer a uno de sus principales militantes uniformados.
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