Hay que saber que, durante décadas, año con año el PIB de este país, con todos sus per cápitas, vertientes, parámetros y proyecciones, según sus tecnócratas ha crecido entre 7 y 10 por ciento. Pero seguimos sin solucionar desde las necesidades esenciales, esas que impiden una vida digna a la mayor parte de sus habitantes (salud y educación, para no abundar más) hasta las más elementales: electricidad continua, limpieza en sus calles, vialidad racional, autoridad pública y transporte decoroso para llegar a todas partes. Entonces, ¿Para qué crecimos? ¿Qué es lo tenemos como país?