-Nadie ha podido explicarme lo que está pasando en Siria. Nadie ha sabido aclararme el asunto de por qué Occidente pudo liquidar a Mouhamed Gadhafi y no han podido derrotar a Bashar el Assad- indicó Alvin y precisó a seguidas –deja un poco los temas locales del PRD y eso y ocúpate de ese asunto. Tu- enfatizó- nos debes eso.

A pagar la deuda voy.

En unos dos artículos que escribí en su momento, señalé que Gadhafi  se había quedado solo; su suerte no le importaba a nadie más que a él mismo y los suyos. Gadhafi había traicionado tanto al Islam del que decía ser parte como a Occidente quien le cobró las ofensas. Para atacarlo y minarlo, Occidente propició el clima, alentó las rivalidades tribales, facilitó armas a los rebeldes, les proveyó legitimidad internacional, consiguió una resolución de la ONU sobre exclusión aérea de la cual abusaron descaradamente para destruir el poderío militar libio y pudieron ejecutar toda una estrategia intervencionista, a gran escala, sin molestar ni violar la frontera de otros vecinos y sin que países mas grandes como Rusia tuvieran tiempo de percatarse y reaccionar. Lo demás es historia conocida.

Casi todas las acciones emprendidas contra Libia lo han sido también contra Siria y sin embargo, el resultado no ha favorecido a Occidente.

¿Por qué?

En Siria la historia ha sido y será diferente en primer lugar porque, Siria es un enclave de importancia estratégica crucial para Irán y así mismo para Heszbollah que cogobierna en el Líbano y que representa la única línea defensiva creíble contra Israel por su frontera noroeste. Ambos saben, perfectamente bien, que la derrota de Bashar los dejaría incomunicados porque Siria es el territorio necesario a través del cual mantener una línea de suministros y apoyo logístico entre las tres partes.  No se puede olvidar que Siria tiene frontera al norte franco con Israel, que las alturas de Golán es territorio sirio ocupado por Israel desde 1967 y que además, la distancia entre esa frontera y Damasco, la capital siria, se puede andar literalmente caminando.

Irán no podría mantener el nivel de apoyo logístico a Heszbollah si se pierde Siria porque, el territorio que lo permite, se vería interrumpido y, una de las razones de Occidente para haber alentado y participado en el apoyo a los rebeldes sirios ha sido precisamente aislar a Irán para evitar que siga ayudando a Hesbollah y para disminuir su creciente influencia en la región y en el mundo.  Los iraníes saben bien que si Occidente derrotara a Bashar ellos y su programa nuclear quedarían en posición más vulnerable.

Resulta que la Rusia de Putin también sabe perfectamente bien todo esto y tampoco a ellos les conviene que Occidente se salga con la suya como hicieron en Libia porque eso los debilita regional y globalmente. Regional, porque Rusia es un suplidor histórico de armas para Irán y para Siria y globalmente porque nada ganan los rusos dejando que EEUU y la UE se hagan mas fuertes a costillas suyas. Por eso, Rusia no ha facilitado la exterminación de Bashar y casi por las misma razones se han mantenido los chinos en posición que a la postre ha favorecido a Bashar.

Ahora bien, meses atrás, Bashar estaba claramente perdiendo la guerra a favor de unos rebeldes envalentonados y ya reconocidos diplomáticamente por muchos países como el interlocutor deseable. ¿por qué el curso de la guerra cambió de dirección?

En mi opinión, el curso de la guerra en Siria ha cambiado debido al ingreso de Heszbollah y no debido a las mas o a las menos armas que uno cualquiera de los bandos haya recibido.

¿Por qué Heszbollah, que es una organización Chiita, se suma tras casi dos años de guerra, al bando de Bashar quien es básicamente laico?

Porque para Heszbollah, la guerra en Siria es un asunto de vida o muerte. Ellos saben que apoyar a Bashar iba a tener un precio en su imagen local e internacional pero al final tuvieron que pagarlo. Bashar no es solamente un dictador, es un dictador cruel e hijo de otro dictador aun más cruel. Pero ellos no tuvieron otra opción. Dejar que Bashar fuera masacrado por fuerzas rebeldes armadas y financiadas por Occidente claramente los ponía contra la pared. El momento es favorable para Hesbollah que ahora podía combatir en Siria sin el peligro de una invasión israelí sobre el Líbano que no podría tener lugar porque la imagen y la credibilidad de Israel está  demasiado dañada para buscarse más líos de los que ya tienen.

Es posiblemente verdad que los enfrentamientos entre las varias facciones rebeldes han perjudicado la causa de estos. Es verdad que la renuencia americana a suministrar armamento en grande a los rebeldes  también los puede haber limitado y no hay dudas de que el apoyo de Rusia ha sido mas claro y categórico que lo habitual pero, dado que el control y posesión del territorio es lo que define quien ganó y quien perdió una guerra hay que concluir que Bashar está ganando la guerra y tengo la convicción de que está ganándola por la participación resuelta de Heszbollah, la única formación militar de la región que ha demostrado que le puede plantar cara a Israel.

Por lo que respecta a Siria y sus decenas de miles de víctimas, a Occidente no le importan esos muertos. Ninguno de los bandos en Siria representa a su pueblo pero Occidente no entendió la lección del general del Ejército Rojo Panfilov quién en 1941 se distinguió en la defensa de Moscú frente al formidable ejército alemán. Panfilov, en plena retirada del Ejército Rojo, ordenó varias acciones contraofensivas que tuvieron mucho éxito. Cuando sus subordinados quisieron repetirlas fracasaron miserablemente. Panfilov entonces les explicó: el enemigo aprende. No puedes sorprenderlo dos veces con la misma táctica.

Occidente quiso repetir en Siria, como copia al carbón, lo que había hecho en Libia.

Debieron fracasar hace rato. Están fracasando ahora. Hay demasiados víctimas inocentes para alegrarse de nada, ni siquiera del hecho de que los ingleses y europeos bien que se merecen una derrota humillante y los sauditas y otros una lección. Entre autócratas, ¿de que vale alegrarse de nada?