Segunda diferencia: Mientras los pensadores del liberalismo independentista, Siglo 19, desde México hasta Argentina, lanzaban plataformas ideológicas, manifiestos, proclamas de guerra y programas reivindicativos que trascendían las fronteras coloniales, aquí nadie se pronunció, más allá de la separación de Haití, contra la dominación y el injusto sistema colonial impuesto durante más de 300 años, y todo el pensamiento independentista se resumió en frase y  apotegmas patrióticos pronunciados en reuniones cerradas, sin una estrategia general política y militar de lucha popular por la emancipación total y la construcción del Estado nacional.