Crea que este es el único país del mundo (¡somos únicos en cantidad de cosas!) donde se ha dado una huelga de controladores aéreos. Crea también que, por tal ocurrencia, las operaciones simultáneas de cinco aeropuertos internacionales han estado a cargo de un sólo controlador. Crea que en este país, por obra y gracia de burócratas corruptos e insensibles, esos profesionales, de quienes depende la vida de cientos o miles de personas en cada instante, no cuentan con el sosiego, la concentración y la paz que requieren para hacer su trabajo. Crea que, de seguir como va esto, en cualquier momento aquí no vendrá un avión ni de milagro.