Hay una ley muy hipócrita, la 284-12 (que antes de ser aprobada nadie leyó), que protege a los animales. Muy bien. Debe ser aplicada,  por supuesto, pero sin hacer excepción de ninguna índole (como la de tránsito, que no obliga en su cumplimiento a los dueños del país, los choferes del concho). Pues ocurre que ahora están impidiendo las actividades de un circo, bajo la presunción de que en éste hay maltrato animal. Muy bien. Entonces, para ser coherentes en hacer el ridículo deben prohibir los mataderos, las granjas de pollo, las galleras y hasta las carreras de caballo (con todo y jockeys y sus fustas)… ¿O es que esos no son animales?