Algunos mayorcitos recordaremos aquel ¡Oh, la televisión!, el llamativo comercial de Toshiba que nos invitaba a observar en la pantalla chica los avances de la industria japonesa en ese ramo.
Viene al recuerdo aquel comercial cuando el PRM sorprende a la sociedad con un proceso convencional que deviene en una rica experiencia de construcción de democracia, exhibiendo prácticas de madurez e institucionalidad internas.
Las provenientes del PRM son noticias relevantes cuando el sistema político acusa debilidades tan serias que hacen imperativo aprobar las leyes de Partidos y Agrupaciones Políticas y del Régimen Electoral para democratizar, modernizar y apuntalar su institucionalidad.
El PRM está marcando diferencias fundamentales con el gobiernista PLD. Mientras desde el milenio pasado el PLD no efectúa elecciones competitivas para renovar sus organismos, el PRM realiza una amplia consulta para elegir nuevas autoridades partidarias. Ya antes había celebrado la convención en que Luis Abinader ganó a Hipólito Mejía la nominación presidencial para las pasadas elecciones.
Pese a la política del partido gobiernista de tratar de torpedear la cohesión interna del PRM de múltiples maneras, incluso a través de una campaña mediática dirigida a descalificar a su dirigencia y la convención, ese partido registra importantes avances.
Sin mayores tropiezos el PRM reestructuró los organismos creados a partir de su nacimiento, confeccionó su Registro de Militantes, con 520 mil miembros que de manera presencial acudieron a centros de inscripción.
El proceso de inscripciones fue validado en todos los niveles por delegados de las dos principales corrientes, con el arbitraje de la estructura institucional, ahora en manos de la Comisión Nacional Organizadora de la Convención que preside el prestigioso intelectual y presidente del Parlamento Centroamericano, Tony Raful y conforman otros experimentados dirigentes.
La presente etapa de la convención ha concluido exitosamente con la inscripción masiva de dirigentes a los puestos nacionales, municipales y zonales.
En los cargos de presidente y secretario general nacionales la corriente de Luis Abinader e Hipólito Mejía respaldan al senador José Ignacio Paliza, el primero, y a su hija Carolina Mejía, el segundo.
Han subrayado que no se trata de un pacto que se imponga a la participación de otros aspirantes, lo cual queda demostrado con la inscripción del actual presidente, Andrés Bautista, de Jesús Feris Iglesias y de Geanilda Vásquez, a la presidencia.
Por la secretaría general compiten también Jesús –Chu– Vásquez, actual incumbente, Leonardo Faña, Andrés Lugo Risk, Aneudy de León y Félix Campusano.
Tony Raful ha precisado que en la Comisión Nacional Organizadora no fue inscrito ni se reconoce acuerdo o pacto alguno entre los candidatos, y que cada quien tendrá que procurarse sus votos.
La corriente Luis Abinader Presidente e Hipólito han respaldado a los candidatos que entienden más apropiados al momento que vive el PRM, especialmente cuando la población demanda impulsar la renovación política y sobre todo darle espacio a los jóvenes y a la mujer, al tiempo de generar una amplia unidad partidaria.
Se trata de un gran gesto de madurez y amplitud política sobre todo de Abinader, que manteniendo en todas las encuestas un porcentaje de apoyo interno que fluctúa entre el 70 y el 85 de la militancia del PRM, optó por no imponer su fuerza en los dos cargos principales de partido.
Es sorprendiendo que está el PRM.