¡Cómo cambia el mundo! Y ahí está el ejemplo de valentía que han dado Isabel y Federica, dos monjas que en Italia abandonaron los hábitos, le sacaron la lengua al Vaticano y se casaron por su misma Iglesia, en una parroquia libre, precisamente a cargo del ex cura Franco Barbero, excomulgado por haber bendecido el matrimonio de dos hombres (pero que sigue ejerciendo el sacerdocio por su cuenta). “Dios quiere personas felices, que vivan el amor a la luz del sol…Pedimos a nuestra iglesia que acoja a todas las personas que se aman”, fue el mensaje de la pareja al Papa Francisco (quien, aunque triste por el hecho, no las condenó).