Bien hizo Hugo Tolentino en poner bien chiquito al “alto magistrado” y ex perredeísta Milton Ray, al devolverle un libro en el que califica a Peña Gómez de “dominicano inmortal”, expresión que hoy deviene en burla o elogio hipócrita, pues al condenar a Juliana Deguis Pierre a la condición de apátrida, como hija de un “extranjero en tránsito”, condenó también a su olvidado líder, quien igual que aquélla, como le recuerda Hugo, “si bien nació en el territorio nacional, es hijo de otro ciudadano extranjero en tránsito (Oguís Vicent), lo cual lo priva del derecho a la nacionalidad dominicana”.