Nueva York.-El senador estatal Adriano Espaillat es el mejor candidato para ser el primer dominicano en Congreso estadounidense, el mejor candidato, sabido es, siempre resulta el peor funcionario. Adriano lleva 20 años como “el mejor candidato”, electo y reelecto a la legislatura estatal.
Adriano es el legislador más ausente del senado estatal neoyorquino, faltó a 1,500 votaciones en las últimas tres sesiones legislativas. Adriano no votó para proteger jóvenes de asaltos sexuales en universidades, para reducir el abuso infantil, ni para impedir aumentos en la renta a ancianos y minusválidos.
Lo último no es casual, recibe miles de dueños de edificios.
Adriano ni va a trabajar, nunca nos podrá representar.
Sin Charlie Rangel postulado al Distrito Congresual 13 de la Cámara de Representantes, Adriano debe ir más cómodo, pero no es así.
Su historia lo persigue, Adriano dividió el voto dominicano hace poco, cuando apoyó a Mark Levine, un blanco, contra Guillermo Linares. Hoy Linares busca el mismo escaño que Adriano y, tiene sus seguidores. Adriano pretende que Linares decline para apoyarlo.
Quienes Adriano apoya, siempre terminan presos.
El concejal Miguel Martínez fue preso por corrupción. Los asambleístas Nelson Castro y Gabriela Rosa cayeron presos, él por fraude electoral y otros delitos, ella por fraude migratorio.
Adriano tiene 20 años en la legislatura estatal neoyorquina, la más corrupta de la nación, donde han trancado a muchos legisladores. Y el FBI investiga sus finanzas. Adriano recién le devolvió más de $14,000 que tomó de uno de los caseros que desalojan a los dominicanos de Washington Heights.
Adriano espera beneficiarse de unos 70 mil nuevos votantes de origen dominicano registrados por DominicanUSA, ahí puede haber sorpresas.
Parece “lógico”, Adriano ganará, pero si la política actual fuera “lógica”, Donald Trump no sería casi presidente, e Inglaterra permanecería en la Unión Europea.