El Banco Central mide la inflación recolectando mensualmente los precios de 305 artículos que impactan individualmente en la variación del Indice General de Precios al Consumidor (IPC) de acuerdo a la importancia que ese bien o servicio tiene en el gasto de la familias. Como influye cada uno en la inflación es lo que se conoce como incidencia, concepto explicado en otras entregas donde se establece que depende de la variación de su precio y la importancia o ponderación que tenga en el gasto.
El dato de la inflación se reporta crudo como barril de petróleo cuando se anuncia “…la inflación anualizada, medida desde noviembre 2018 hasta noviembre 2019, se ubicó en 3.23%” o refinado como uno de sus derivados, por ejemplo, al destacar que la inflación subyacente “anualizada fue 2.20%, un indicador que estima las presiones inflacionarias de origen monetario, aislando los efectos de factores exógenos”. En las dos pasadas entregas comentamos de los 66 bienes y servicios que se excluyen para calcular la inflación subyacente, las razones para hacerlo y se aprovechó para hacer cálculos de su incidencia en el IPC general.
Otro dato refinado de la inflación es la que divide entre los bienes Transables y No Transables. La división es curiosa porque se supone que para todo bien o servicio se están registrando mensualmente los precios que se encuentran en los establecimientos. Si hay precios hay intercambio de dinero por mercancías y todo se está transando. Estuve como director en ese departamento del Banco Central hace siglos y creo recordar algo así de algunos de los colegas o supervisores (Susana, Luis Manuel, Mercedes, Olga, Gladys, Carmen Julia, Marino, Marina, Luis, Ana, Vizcaíno, Joel,…). Tomaba notas en mascotas rayadas de hilo que todavía conservo, pero no tendré que buscar porque la discusión semántica no duró mucho: Susana la sepultó con San Antonio incluído “¡Dejen de …, todo el que lee por arribita el párrafo entiende a que se refiere el NO!”
¿Está claro en éste que se incluyó en reporte de noviembre pasado sobre la variación mensual?
“El índice de precios de los bienes transables, aquellos que pueden exportarse e importarse libres de restricciones, varió 0.53% debido principalmente a los aumentos en los precios de los pasajes al exterior, gasolinas y gas licuado de petróleo (GLP), pinturas, cerveza envasada y en algunos bienes alimenticios como plátanos, ajo, habichuelas, aguacates, verduras y zanahorias. El IPC de los bienes y servicios no transables, los que por su naturaleza sólo pueden comercializarse dentro de la economía que los produce o están sujetos a medidas que limitan las importaciones de los mismos, creció 0.21%, fundamentalmente por los aumentos en los precios de los servicios de internamiento, plato del día, cerveza servida fuera del hogar, cebollas y plátanos maduros.”
Susana Gamez tenía razón. El NO es un puente entre lo que se comercializan con facilidad internamente o con el extranjero y aquellos que sólo se transan localmente o están sujetos a barreras impiden importaciones. El párrafo menciona ejemplos de cada grupo, pero con los anexos que presenta en los informes anuales cada artículo de la canasta básica se identifica como bien o servicio; si se incluye o se excluye para el cálculo de la inflación subyacente; y si esta considerado como Transable o No Transable.
Si la proporción de bienes No Transables en la canasta básica es un buen indicador del grado de apertura de una economía, ¿qué les parece nuestro dato? Como bienes no transables, que entre las causas para clasificarlos está la de estar “sujetos a medidas que limitan las importaciones”, están clasificados 84 de 305 ítems de la canasta básica que tienen una ponderación de 48.4%. Es decir, casi la mitad de los bienes y servicios son considerados como No Transables, cuando para países pobres, pequeños e isleños lo más recomendable es una integración total al comercio internacional que provoque tener mucho menos NO.
En la imagen la distribución de los bienes y servicios No Transables por grupos en una lista donde aparecen 11 de los 12 en que se clasifica la canasta. El único que no está es Bebidas Alcohólicas y Tabaco donde todos los items se consideran transables. También se incluye la lista de los 17 que están en Alimentos y Bebidas No Alcohólicas. Arroz, carne de pollo, azúcar, leche, habichuelas y pan están en ese grupo que acumula una ponderación cercana al 10%. Al estilo PISA, en las estadísticas de la DGA lo que informa la tabla de aranceles de esos productos es un dato, el Banco Central con esas tarifas y otras informaciones se forma una opinión de que son No Transables. En su visita al mercado de su preferencia encontrará sus precios (dato) y con los que puede buscar en países con economías más abiertas, formarse su opinión de que lado del puente o del muro le gustaría que estuvieran los bienes que compra.