Frases odiosas que no me gustaría escuchar de Abinader: “Trabajaré sin descanso” (No. Toma tus vacaciones cada seis meses); “Me sacrifico por la patria” (Nadie te paga para que te sacrifiques por nada, sino para que  lo hagas bien); “Soy un instrumento del destino” (Eso es falso, pues un presidente de república no es más que un funcionario a sueldo); “No tengo vida privada” (Ojalá que Raquel no coja cuerda con tantos lambones en la casa); “Me voy con la frente en alto” (La frente es inamovible. Nadie puede ponérsela en la barriga o debajo de un brazo); “Me siento satisfecho por el deber cumplido” (Gracias… de nada).