Cada vez que veo al nieto del tirano moviéndose por todos lados y hablando pluma de burro, sólo pienso que si la Junta Central Electoral esta no acata la vigente Ley 5880, del año 1962 (la del “nunca jamás”), que prohíbe todo tipo de actividad que alabe la imagen de la familia Trujillo o su régimen, ni tampoco acata el Artículo 20 de la Constitución de la República, que establece lo que todo extranjero tiene que hacer previo a ser candidato a la Presidencia de la República, entonces no hay más que discutir: simple y sencillamente esta Junta es trujillista.