Se dice entre los corrillos de la militancia del PRM, que en las encuestas, (mecanismos que se usó para medir y valorar la simpatía de los precandidatos a la Alcaldía SDE con la finalidad de escoger uno entre dos en representación del H20), los resultados desfavorecen a la precandidata rubicana Katy Báez para las primarias internas de 6 de octubre de este año.
En caso de ser así, mi sugerencia va en dirección a ese equipo fortificado de dar ¨un paso adelante, dos pasos atrás¨. Es la decisión que conviene que haga el candidato cuando la posición o los factores externos no controlados no se muestran a su favor en ese instante, y más cuando ese candidato ha avanzado mucho en el camino tiene la ventaja. En efecto garantizaría la ¨herencia política¨ del H20. Recordemos el caso del acuerdo politico denominado: ¨café con leche¨, donde Hipólito Mejía era el candidato oficial a la vicepresidencia de la República Dominicana (…) y sin hacer resistencia, dio paso a un extra partido Licdo. Fernando Álvarez Bogart para que acompañara a Peña Gómez en el año 1996. ¿Qué sucedió cuatro años después?: Hipólito Mejía se convirtió en el heredero natural de Peña Gómez y fue candidato a la presidencia de la República por el PRD, declarado por JCE como ganador del torneo electoral en dicha ocasión.
Por esta razón lo que procede es dar ¨un paso adelante¨ qué significa: coherencia, respeto a la máxima dirección del organismo, prudencia y cohesión para mantener a flote la lucha en la misma dirección de la embarcación que transporta los intereses, sean colectivos y/o particulares. Y ¨dos pasos atrás¨ que indica el ensanchamiento de las capacidades para el proceso de maduración: a la actitud, a la tolerancia, al nuevo proceso para reflexionar; la disciplina para reorganizarse, la recomposición de la fuerza, y la autocrítica para evaluar las estrategias aplicadas por dentro y por fuera, una especie de auto-análisis FODA.
También construye un puente de conexión con el liderazgo central (Hipólito Mejía) en las futuras contiendas internas del partido en la carrera hacia a alcaldía de SDE, generando la confianza y la cohesión interna de los grupos de apoyo.
Por último cabe recordar que un candidato desunido por la cólera que genera el fragor político, o la intolerancia de algunos de sus miembros a no acatar una decisión central y acordada previamente entre los actores, es irrisiblemente abrirle las puertas a la anarquía; aún más, corre el riesgo de quedar aplastado bajo el muro del desacuerdo, disminuido por la lucha a corto plazo y estancado por la miopía política que no le permitiría jamás ver después de la curva, menos visualizar los beneficios que le depararía el futuro en política.
En resumidas cuentas, a partir de lo que se ve desde mi pequeño campo de acción: el camino de Katy Báez, con mira a las primarias del 6 de octubre y las elecciones generales del año 2020, es apoyar a Hipólito Mejía como candidato a la presidencia de la República; y en cuanto a la candidatura para dirigir el Ayuntamiento de SDE, si las encuestas hoy no le dan a Katy Báez los números requeridos por H20 para representarlo, lo que sigue es abocarse a respetar el acuerdo según el ¨resultado¨ de dicha medición técnica que supone da cómo el más ¨valorado¨ y ¨único¨ candidato posible por el momento, al pastor Dio Astacio para enfrentar a Manuel Jiménez.