La Junta Central Electoral es ese organismo que hace millonarios a los políticos del patio, dirigido por un presidente peculiar y autoritario en su actuar, y que llama poderosamente la atención el inexplicable despilfarro millonario que desembolsa cada cierto tiempo en los prostituidos y gastados partidos políticos dominicanos y que van directamente a los bolsillos de esos "defensores" de la democracia dominicana.
Esos partidos que hoy son agencias de empleo, base para recaudar millones de pesos y nombramientos a veces inoperantes cuando alcanzan el poder, se ven alimentados por unos fondos públicos que el raciocinio colectivo del pueblo no termina de comprender. Recientemente, un funcionario de la JCE, tuvo la desfachatez de considerar esa cantidad de millones de pesos que acaba de entregar a estos partidos como una "bagatela". Dinero de cada uno de nosotros.
En un país pobre como el nuestro con tantas necesidades perentorias regalar millones de pesos para financiar o mejor dicho lucrar los bolsillos de estos políticos, considerar que esta es una cantidad de millones de pesos irrisoria es una falta de respeto a esta sociedad. Un robo público!
Aunque dijo un amigo periodista que “la JCE no le da dinero a los partidos, se los da el Estado y por mandato de una Ley. La Junta sólo hace el cálculo, confecciona cheques y entrega”… Sea un comentario certero o no, esta confabulada con el Estado con el pretexto en “aras de fortalecer la democracia” de inyectar ingestas cantidades de millones de pesos en los bolsillos de aquéllos que manejan esos partidos políticos y que tampoco rinden cuentas a ningún organismo acreditado con estos fines.
Como esta sociedad continúa carente de todo grupo o formación social con fuerza que reclame y pida explicaciones por exigir rendición de cuentas de todo esos millones que tan alegremente se entregan a los partidos. Esta “donación” graciosa y carísima es una vergüenza nacional que bien podría servir para paliar reales necesidades.
Al parecer tampoco le piden explicaciones en gastos y ejecuciones al presidente de la JCE, que hace y deshace a su antojo y actúa como si esa institución fuese de su propiedad.
En definitiva, la Junta Central Electoral y la "bagatela" de millones de pesos al que tienen acostumbrados a los políticos del país dan ganas de llorar. Natural, que todos quieran formar un partido político….gran negocio!!