José Tomás Pérez, embajador dominicano en Estados Unidos, que conoce en este país al tuerto durmiendo y al cojo sentado, miembro del Comité Político del Partido de la Liberación Dominicana, y quien ha sido hasta precandidato presidencial, protesta desde Washington por lo de César el Abusador: “Detenido con drogas en varias ocasiones…y libre; acusado de herir a varias personas…y libre; decenas de negocios ilícitos…y libre; jefe de todos los narcotraficantes…y libre. ¡Pero, diablo, denme una explicación creíble a este desatino!”. (A sus años debe saber que ser ingenuo o hacerse el pendejo son pecados imperdonables).