La noticia corrió de prisa; felizmente, después de la exitosa Jornada de Oración por la Paz realizada por la Iglesia católica, y por primera vez en la historia, no se han registrado delitos violentos de sangre en la República Dominicana.
Y ha sido tanto el éxito, que el Estado decidió reorientar su política policial contra el delito y dirigir el 80 % de sus recursos hacia las diferentes iglesias para que, en "grupos de oración", patrullen día y noche y sin cesar barrios y ciudades, montados en cómodos autobuses, rezando, exorcizando los demonios violentos que incitan a los hombres al delito, repartiendo Hostias Santas y Agua Bendita a granel, hasta que se agote el trigo de Los Molinos y se seque el lago Enriquillo.
Sin embargo, el éxito levantó protestas, pero no de los delincuentes, sino de los círculos policiales y judiciales, quienes, sin tener a quien perseguir, temen perder sus empleos. Por otro lado, "brocheros" cercanos a la curia criolla comentan con alegría que ésta ha sido "la más maravillosa idea aportada por la Iglesia a la nación en sus 500 años de pastoreo espiritual sobre el pueblo colonial y republicano". Aunque otros más juiciosos le han dicho con sonrojo: "rebájenle algo".
Sin embargo, han aparecido los inconformes de siempre: se preguntan por qué los obispos de la Conferencia ocultaron por tanto tiempo ésta, su maravillosa y genial idea. Dicen que, de haberlo hecho antes, hubiesen evitado, además de lo de Higüey, sangre y dolor al pueblo dominicano. También se informa que muchos políticos que no creen ni en su propia madre, ahora aparecen rezando como locos.
Otros suspicaces, comunistas al fin, han visto en esta Jornada de Oración por la Paz una maniobra más del Imperialismo Yanqui que procura mantener a las gentes sumidas en el opio de la superstición y la magia, mientras ellos roban los dineros de los pobres y mantienen el "bloqueo cubano".
Se rumora con insistencia que en los próximos días llegará una comisión de la DEA a observar el operativo que, de ser cierto, será implementado en varios países de América Latina, para evitar el tráfico de drogas y economizar recursos. También se anuncia la llegada de una comisión de expertas "Rezadoras de Guadalupe" mexicanas que vienen a aprender la técnica para ofrecer sus servicios a su agobiado gobierno acosado por la violencia.
Todo se originó cuando los prelados de la Conferencia del Episcopado Dominicano, después de tres días de arduo retiro y oración, fueron iluminados por el Espíritu Santo, y, en una revelación colectiva, la Virgen protectora de los dominicanos les dio la original fórmula para acabar con la violencia", esto, a pesar de la oposición de uno o dos curas azarosos que, faltos de fe, dudaron del poder de Dios y apostaron al fracaso; argumentando lo ridículo del plan ,diciendo que ya "la gente maneja el Internet y que solo sería acogido por los tontos" ¡Qué equivocados estaban!
Aunque invitados a participar en la campaña, los Evangélicos pusieron como condición que sólo se rezara el Padre Nuestro, arguyendo no creer en postalitas ni en la Virgen de las Mercedes (la persecutora de indios) y diciendo que "si le sacaban un Rosario o le mencionaban a la Tatica de Higüey, iban a abandonar el operativo conjunto". Se dice que, aun sabiendo lo que venía, era deber de la Iglesia invitarlos al evento "para guardar apariencias ecuménicas como nos enseña el Papa".
Tan grande ha sido la algarabía que la noticia ha llegado a oídos de los meteorólogos quienes, luego de solucionado el problema de la violencia de las gentes, esperan solucionar la de los huracanes; alegan que se pueden utilizar los mismos grupos de oración para desviar ciclones ya que, durante esta temporada ciclónica, viejas rezadoras católicas de fe evitaron la visita de los violentos vientos al territorio dominicano con sus rezos , empujándoselo (el ciclón ) a los creyentes protestantes norteamericanos.
En todo esto, muchos han visto que la Oración, lejos de desaparecer, se hace cada día más necesaria y, por ello, han felicitado a la Iglesia jerárquica por su genial idea y, además, los exhortan para que, como su mejor aporte a la tecnología moderna y al progreso de los dominicanos, registren la autoría para que podamos vender esta gran idea salvífica a otras naciones y engancharnos en el mundo de la tecnología.
Pero esto no se quedará aquí; "Pistola por Brocha", se llamará el operativo que se empezará la próxima semana: los policías abandonarán sus armas y saldrán a pintar sobre las paredes de los barrios unos versículos Bíblicos o "graffitis santos", marcando Cruces en las puertas de las casas de los sospechosos, para que, a semejanza de "Las 7 plagas de Egipto", evitar que el espíritu del Diablo y la violencia entre por la puerta y penetre en sus hogares.
Se comenta que, de ser efectivo este asunto de la "brocha", se les pintará una pequeña cruz en las nalguitas a los niños para impedir que el Demonio Pederasta los acose por el patio trasero. Sin confirmación alguna, se rumora que esta gran idea fue comunicada a Roma y acogida por el Papa, quien, en buen latín y baja voz comentó "Ita depilatus Dracula": "Así jodieron a Drácula".