Guillermo Moreno escribe por mí: “El amplio reclamo para que Miriam Germán fuera Procuradora General de la República se fundaba en que ella, por su independencia demostrada, su honestidad y capacidad, es garantía de que en el caso Odebrecht no haya impunidad…Ahora ella es responsable de darle continuidad a ese expediente, frente a ese mamotreto de investigación que ella denunciara…Lo que le toca no es inhibirse, sino dar un paso al frente y, siendo coherente con los juicios expresados en su voto disidente en la Suprema, pasar a recabar los medios de prueba necesarios y hacerlo con la mayor objetividad procesal”.