Es un país gobernado por gente que hace, pero sin saber por qué hace. Un país en el que  '"Pragmatismo" es ser santo y seña de mandatarios y líderes practicantes de todo lo aprendido en la práctica. Y, de práctica en práctica, el país ha llegado a ser  economía práctica, liderazgos prácticos, planes y proyectos prácticos. El resultado es una realidad práctica que tiene en el pragmatismo el fracaso de sus soluciones prácticas. (Por eso se pretende que, visto el fracaso de la Junta Central Electoral, la actual crisis política se resuelva en un Consejo Económico y Social que, por impráctico, nunca ha podido llevar ni una gata a mear).