Copio el mensaje (que apoyo) de Simón Guerrero, distinguido ciudadano culto, serio y sin malicia: “El año que viene que la Feria (¿del libro o del chimichurri?) no la realicen en la Plaza de la Cultura. Y, en la actual, que no permitan que arrabalicen los alrededores. Eso sería un buen comienzo. El más importante centro cultural del país no soporta que le construyan un ensanche tablita cada año. ¡Por piedad!”. Yo: ¿Es tan difícil que esta especie de Estado cuente con un buen recinto amplio, moderno y eficiente para ésta y cualquier otra feria? (Pedro Vergés dirá… talvez…quizás…nadie sabe).