Nueva York.–– Eric Schneiderman, el fiscal general neoyorquino, tiene más popularidad que Barak Obama. Porque el presidente propone "negociar" con los banqueros que montaron la estafa del 2008, Schneiderman quiere enjuiciarlos; "solo estoy haciendo mi trabajo", le dijo a The New York Times.

Vendiendo préstamos truculentos, fiando casas que nadie pagaría, los banqueros se quedaron con dinero y propiedades de 15 millones de estadounidenses desalojados; en esa "crisis financiera", casi 30 millones quedaron desempleados.  Una familia promedio tiene tres personas, esa cantidad depende de cada empleo. La estafa empezó afectando unos a unos135 de los 307 millones de estadounidenses, ahora arrasa el planeta.

Washington "rescató" la banca, pagándole $700 mil millones por las "malas hipotecas", prestándole $1.2 trillón sin intereses. Ahora retienen dinero y propiedades, mientras millones siguen viviendo en las calles.

Obama propone que Bank of America, Wells Fargo, Citigroup, JPMorgan Chase y otros grandes bancos paguen $20 mil millones como "indemnización" para no ser enjuiciados. Schneiderman, correctamente opuesto, asume la voz de la consciencia nacional buscando justicia para los estafados. Lo apoya el mundo, la nación, los legisladores neoyorquinos y procuradores generales de Kentucky, Jack Conway,  California, Kamala Harris, y Delaweare, Joseph "Beau" Biden III.

Bernard Madoff está preso por estafar ricos, pero Obama quiere impunidad para quienes estafan pobres. Eso desató una indignación nacional, extendiendo la protesta contra Wall Street a Boston, Chicago y San Francisco, Obama navega contra la historia, Schneiderman lleva la dirección correcta.

Schneiderman, un judío neoyorquino que por momentos cree que nació en Sosúa, es el político estadounidense humanamente más ligado a la República Dominicana. Es un extrañísimo especimen político que todavía defiende al pueblo, merece el apoyo mundial antes de que se dañe.  Los dominicanos debemos internacionalizar el apoyo a Schneiderman, mundializando la tradicional consigna: "Eric, querido, el mundo está contigo".