Nueva York.-Estamos viviendo un momento único en la historia humana.
Sabemos que cayeron los imperios mongol, griego, romano, español, inglés y otomano, vimos caer el soviético, pero nunca creímos que veríamos caer a los Estados Unidos. La nación lleva 19 años en caída libre desde el impasse entre George W. Bush y Al Gore.
En el 2001 destruyeron las simbólicas torres gemelas. Llevamos 18 años gastando unos $32 millones cada hora en las guerras de Irak, Afganistán y Siria, resulta sencillamente insostenible.
El ex presidente Barack Obama amenazó con “serias consecuencias” si el gobernante sirio usara armas químicas. Las usaron, nada pasó.
“Los días de Nicolás Maduro están contados”, dijo el secretario de Estado Mike Pompeo. Elliot Abrams, su encargado de Venezuela dijo que se tomará "como" un año, esos días son "como" 365; de nuevo, una amenaza no cumplida.
Washington degeneró en perro que ladra y no muerde, no controla su “traspatio”, no es imperio ni nada
Y las caravanas migrantes avanzan hacia la frontera, como avanzaron los “bárbaros” durante la caída del Imperio Romano.
Ante nuestros ojos, el imperio agoniza, resulta muy evidente.