(A los que aman la verdad y no le temen)

 Las religiones en su afán por esclavizar los corazones han creado convenientes brechas de odio e incomprensión social, han utilizado el nombre de Dios para proteger sus propios intereses personales y los de sus instituciones religiosas. 

Lo que dijo el loco

En la Florida otro loco y cínico religioso (que no ha sabido -como muchos saben- ocultar la locura innata que a todo religioso ataca) ha desatado una sangrienta protesta en Afganistán que lleva docenas de muertos, todo, porque ha dicho que el Corán es diabólico y que hay que quemarlo en la hoguera porque está lleno de odio y violencia, pero así han confirmando con sus hechos "lo que dijo el loco" cristiano. 

Una Biblia por mil Coranes

¡Qué ironía!, no saben los cristianos que en una sola Biblia judeo cristiana de Jehová hay contenida más violencia y odio que mil Coranes de Mahoma. Pero ambos grupos se nutren de incentivar la división entre sus sumisas gentes brutas para después decir que son abanderados del amor, como predican. ¡Cínicos impenitentes! Con el perdón de mis amigos pastores y curas inteligentes (y sus familiares), les dolerá, pero es la verdad y les toca escucharla. 

Mosquito y camello

Las guerras religiosas y otros hechos macabros lo demuestran; basta recordar la triste Inquisición cristiana para saber que el texto Bíblico sagrado venerado entre nosotros ha sido capaz de crear monstruos. De allí han surgido personajes que se muestran al público como santos varones de Dios capaces de "colar el mosquito y tragarse el camello". 

Ciertamente, bajo el aparente amor que los religiosos predican subyace el peor de los odios. En su afán de agradar a su Dios y complacer la "locura de amor" universal con la que procura uniformar a todos los hombres bajo una sola creencia (cristiana o musulmana), los sacerdotes han cometido el peor de los crímenes: Promover el odio y la división entre los hombres. 

Los peores

Cuando se les acerque un pastor (alemán o musulmán) o un cura de cualquier negocio religioso, abrid bien vuestros ojos, porque les han programado -en nombre del amor- para inocular el odio en nuestras mentes…Por ello suceden estas manifestaciones de locura y muerte entre cristianos y musulmanes. 

Y que no me vengan los cristianos a decir que los musulmanes son los peores. 

Que vean su propia "VIGA" de violencia, la que está en el ojo de su historia eclesial y de su Biblia judeo cristiana. Mejor es que paren de echarle fuego al fuego diciéndoles a sus creyentes que la salvación sólo está en su iglesia y en su fe cristiana, y los que no comulgan con sus creencias son hijos del Diablo. 

Ciertamente, la escena más poderosa de cinismo posible de presenciar en este mundo es la de un religioso hablando de su "Amor" desde un altar de Dios, conociendo a plenitud que sólo promueve el odio, la división y la violencia entre los hombres. ¡No los perdones Señor, porque ellos Sí saben lo que hacen! Y a ti Dios, no seas maricón, no te dejes coger de pendejo.