Monseñor Ramón Benito de la Rosa y Carpio puso el dedo sobre la llaga: “Los periodistas y medios de comunicación deben reaccionar para detener prácticas en el periodismo dominicano y otros medios alternativos donde operan sicarios mediáticos que atentan contra la vida moral y emocional de las personas y lo hacen generalmente porque les pagan para hacerlo”…El sabe lo que dice. Los conoce. Los conocemos. (A los mercenarios. A quienes les pagan y a los medios que tristemente concurren, consienten y promueven esa profunda lesión a la dignidad de nuestra profesión, y que, por tanto, no reaccionarán para abolirla).