Hace 17 años, a los dos "estados" de esta isla (que en realidad es una nave a la deriva que se le olvidó a Colón), se les ocurrió la curiosa idea de crear una Comisión Binacional intencionalmente nati muerta, solo destinada a entretener a los más inútiles bufones de la binacional burocracia. Por eso, ninguno ha tenido la capacidad ni el deseo de formalizar un tratado comercial que acabe con la poderosa industria del contrabando y el macuteo, de lo que lucran las mafias, juntas o separadas, de ambos lados de una frontera prácticamente imaginaria…A su conveniencia.