“Si sales a ganar, es posible que puedas empatar, e incluso perder. Si sales a empatar, es casi seguro que perderá” (Anónimo).
Si el Índice de Competitividad Mundial 2017 _2018, del Foro Económico Global, es el altavoz de nuestro presente, nos aterra que se constituya en el profeta de nuestro futuro. Nos está diciendo este año, que la sociedad dominicana se mueve en un inmenso océano secular de gatopardismo y de una tautología añosa que no nos permiten cimentarnos en el desarrollo real. Nos retrata y enrostra la pésima calidad de los actores de políticas públicas y de la elite social empresarial.
En el 2012/2013, de 144 países evaluados, obtuvimos un promedio de 105. En el 2013/2014, de 148 países, quedamos en 105. En el 2014/2015, con 144 países, nos quedamos en 101. 2015/2016, de 140 países evaluados, alcanzamos un promedio de 98. La mejor evaluación a lo largo de los últimos 7 años, fue en el 2016/2017, donde se valoraron 138 países y nos situamos en el rango 92.
Pero, ahora, en el 2017/2018, de 137 países estudiados en el Índice de Competitividad Mundial, sacamos una nota promedio de 104. Esto quiere decir, que descendimos 13 puntos con respecto al año anterior. Uno de los países que más se devaluó en materia de competitividad, de un año a otro. Es importante resaltar lo que es la competitividad ,se refiere , según Idalberto Chiavenato “al grado en que una nación puede, en condiciones libres y justas del mercado, producir bienes y servicios que sean aceptados en los mercados internacionales, mientras que, al mismo tiempo, mantiene o expande las ganancias reales de sus ciudadanos”.
¿Cómo define el Índice de Competitividad Mundial la competitividad? Como “el conjunto de factores, políticas e instituciones que determinan el nivel de productividad en un país y que fomentan el nivel de prosperidad al que puede aspirar una población.”. Esos estudios son muy rigurosos; elaborados en base a cuestionarios aplicados a empresarios y académicos de los países tomados en cuenta cada año. Hay que fijarse que pocas veces coinciden entre un año y otro, de los países considerados; y, ello es así, producto de la necesidad de contar con informaciones y datos que respondan a los niveles de confiabilidad y validez. De 194 países que hay en el Mundo, en La ONU, el Foro Económico Global, nunca ha evaluado más de 148. En esos índices anuales, intervienen otros organismos internacionales, tales como Fondo Monetario Internacional, Banco Mundial; Banco Interamericano de Desarrollo, Transparencia Internacional, y, otros.
La pregunta crucial, para poder construir actitudes positivas, que propicien un golpe de timón, es, por que descendimos 13 puntos? La primera respuesta es que la desigualdad social en la Republica Dominicana, se amplio, la asimetría social y económica se expandió. En segundo lugar, la movilidad social vertical ascendente, sigue moviéndose al galope de una tortuga. En tercer lugar, estamos en presencia de una fuerte anomia institucional; hay una ausencia del cumplimiento de las normas y de su inobservancia, lo cual profundiza la debilidad institucional; y, en cuarto lugar, la corrupción, desmejoro, declino y se desfiguro, en el interregno 2015/2016 y 2016/2017.
Lo más grave del Índice de Competitividad del 2017/2018, es que de los 12 pilares en que descansa la investigación, 6 están por encima del promedio general, que fue 104/137. 8 pilares se deslizaron por la pendiente negativa, con respecto al 2016/2017. Si a eso le añadimos, que en el marco del Pilar Institucional, cuyo promedio fue 129, esto es, 25 puntos de desviación negativo.
El Pilar Institucional (129/137), que es la mirada de cómo andan las instituciones y el rol de la corrupción, descansa en 21 renglones, donde 13 de ellos , están por encima del promedio general del Ranking: 104, que es por decirlo así, muy pesaroso, en un país con ingreso de renta media, donde el mismo Foro Económico Global, señala que tenemos un ingreso per cápita que ronda los U$7,159.5 Dólares y que el Producto Bruto Interno oscila en los U$72.2 Billones de Dólares.
El principal factor negativo, problemático, para los negocios en nuestra sociedad, sigue siendo: La corrupción. En los demás países de America Central, nuestros competidores primarios, la corrupción no es el rango principal. Ocupa el segundo, tercero y quinto lugar, como cuerpo canceroso para los negocios.
Veamos lo que nos dijo el Foro Económico Global, a lo largo de los últimos 3 años, con respecto al Pilar Institucional, que constituye el eje transversal que toca a los demás 11 pilares y 116 renglones:
La violencia y su relación con los negocios y el crimen organizado, ahora, acusan un peso significativo: 125 /137 y 115. Esto afecta, denodadamente el ambiente macroeconómico, que de 26 puntos que tenía en 2016/2017, desmejoro en casi un 100%, obteniendo 49. El Foro Económico Global, a través de su Índice de Competitividad Mundial, nos suministra una cantera de información, de datos, que con actores políticos y elite empresarial mas proactiva, más comprometida con el futuro, nos permitirían diseñar , construir , políticas públicas para añorar un futuro sobre carriles mas ciertos, con mayores niveles de certidumbres.
El Foro nos llama, a una mirada más objetiva, más seria; nos invita a dejar atrás, a rupturar la cultura de la autocomplacencia, a disminuir la cultura del acuario. Asumir nuevas actitudes que destrocen el vivir contorneándose en la dimensión del halo, del que arrastra un solo factor positivo y quiere potencializarlo favorablemente en los demás factores que gravitan sobre una sociedad, aunque esto sean negativos para el cuerpo social. Fortalecen, así: la incapacidad de admitir equivocaciones, de dibujar la exacerbación del monopolio de la verdad y de amplificar la hiperinflación del yo.
Hoy sabemos que el talento es necesario para alcanzar el éxito en la dirección de cualquier empresa humana que se despliegue; empero, este no es suficiente. Se requiere la actitud, el relacionamiento, el liderazgo y el eje vital del objetivo común. Dirigir un Estado, es el compromiso con la sociedad, de mover el carro de la historia hacia un estadio superior, con mayor bienestar y calidad de vida.
Países con Desarrollo Humano medio, como Honduras, Nicaragua, Guyana, Bolivia, Surinam, Belice, con puntuaciones menores que República Dominica, en Desarrollo Humano, en el Índice de Competitividad se encuentran mejor. Es claro que si seguimos así, no alcanzaremos los 17 peldaños de los OBJETIVOS DEL DESARROLLO SOSTENIBLE, en el 2030, como no logramos los 8 Objetivos del Milenio (2000/2015). Parafraseando a Mario Benedetti, nos están cambiando todas las preguntas, ameritamos nuevas actitudes, para alcanzar respuestas correctas que nos permitan transformarnos como país.