Por el bien de la verdad histórica debemos continuar con la labor de denunciar y refutar las mentiras confeccionadas por Balcácer en su panfleto clerical “Duarte nunca fue excomulgado. Hoy denunciamos las mentiras número 3 y 4.
Mentira #3
Balcácer sabe que fue el Padre Sáez quien dijo: “como pago para ese supuesto servicio, el dictador solicitó al Papa la consagración de Portes como Arzobispo”, sin embargo ha decidido mentir y decir que esto lo dijo el “Foro por un Estado Laico Eugenio María de Hostos”, tratando de quitarse de encima ese pesado fardo que le echó en sus espaldas su amigo Sáez y de paso tirarle la toalla por su error de ser sincero.
Mintió al decir que:
<< Incluso se ha llegado hasta el extremo de afirmar [el Foro] que, como pago para ese supuesto servicio, el dictador solicitó al Papa la consagración de Portes como Arzobispo. Nada más incierto>> (Pág. 39 del opúsculo “Duarte nunca fue excomulgado)
Balcácer sabe que esta afirmación es totalmente verídica y que salió de la misma boca del Padre Sáez en la entrevista de UNO+UNO del viernes 5 de Marzo del 2013 en Teleantillas canal 2. Pero Balcácer nos miente con gran descaro aun sabiendo que el público puede escuchar al sacerdote en el video cuando afirma que Santana le pagó el favor ése a Portes, con solo entrar a este link: http://youtu.be/FKUGx0EnlCw . Escúchelo decirlo en dos ocasiones: en el minuto 11:36 y 14:35 de este video de Uno+UNO, con Juan Bolívar Díaz.
Como usted pudo comprobar: Dice el sacerdote Sáez que el general Santana le recomendó al papa la consagración de Portes como arzobispo para pagarle el favor ése , el de la Carta Pastoral que decretaba la Excomunión automática de Duarte.
Lo ve señor Balcácer, usted mintió, no fue el “Foro por un Estado Laico” quien lo dijo, sino su amigo Sáez, a quien usted consultó para hacer su panfleto, a quien usted escuchó decirlo ese mismo día cuando participó en el programa, junto a nosotros… A confesión de parte… relevo de pruebas.
Mentira #4
Balcácer niega lo dicho por Sáez: que fuera Santana quien recomendara a Portes como arzobispo al papa, en pago por “sus servicios por excomulgar a Duarte”
Esencialmente, el argumento con el que Balcácer pretende desvincular a Santana del nombramiento de Portes como arzobispo se basa en el hecho de que el decreto que “eligió a Portes” para ese fin (del 11 de mayo de 1844) no fue firmado por Santana y alegando que el general, un año después, solo se limitó a cumplir la orden de aquella Junta Central Gubernativa de la que él no formaba parte.
Balcácer mejor que nadie sabe que el dictador Santana no estaba obligado a cumplir la orden de aquella junta gubernativa (como afirma), y que si la cumplió fue por le vino en ganas, porque él decidió beneficiar a Portes por el favor ése de excomulgar a Duarte y no porque existiese ese decreto pues, como dictador, pudo haber emitido uno igual.
Balcácer sabe razonar y por lo tanto sabe muy bien que si Portes se hubiese negado a excomulgar a Duarte para favorecer a Santana, Santana hubiese dejado engavetado el decreto o lo hubiese derogado y nombrado a otro sacerdote como arzobispo electo con otro decreto. Esta supuesta obligatoriedad que tenía Santana de cumplir con el decreto no era tal obligación. Santana hizo lo que quiso, en este caso, pagarle el favor ése a Portes, desengavetando el decreto.
Tampoco es cierto, de que éste (Santana) simplemente se limitó a dar cumplimiento a una disposición ejecutiva y legislativa de quienes le antecedieron en el mando. No, Santana no se limitó “simplemente” a dar cumplimiento, como su fuese en contra de su voluntad, sino que, al desengavetar el decreto, demostró una voluntad política para favorecer a Portes, algo muy diferente.
Balcácer ha asumido que, el hecho de que Santana decidiera desengavetar el anejo expediente y firmarlo para enviarlo a Roma, fue un acto forzado y no un acto de voluntad política, un acto personal con el que decide beneficiar directamente al vicario Tomas Portes para pagarle el favor ése que habla Sáez. Pues, sin su diligencia y voluntad el expediente hubiese quedado dormido por siempre en una gaveta.
La voluntad política Santana, su agradecimiento a Portes quedó manifiesto cuando Santana, en vez de derogar el viejo decreto o dejarlo engavetado, activó el expediente, es decir, le dio su consentimiento y lo envío a Roma.
Sobre otras medias verdades contenidas este mismo argumento
Alega Balcácer que el decreto estaba firmado por Duarte y por Sánchez (como lo está ciertamente), pero lo dice con malicia y acechanza, diciendo medias verdades, pues oculta que dicha junta estaba conformada por una mayoría santanista conservadora, es decir que estaba dominada por la misma Iglesia de Portes; y que por lo tanto ambos próceres debieron firmar el decreto de forma automática pues los duartianos liberales eran minoría en aquella junta. Se sabe que ellos no estaban contentos con la mayoría santanista conservadora, como se demostró luego cuando los duartianos le dieron un golpe de estado a esa misma Junta, 29 días después de este decreto, el 9 de junio de 1844, para colocar en ella a sus seguidores y quitar a los de Santana
Inteligentemente, Balcácer trata de minimizar que Santana, como lo testifica Sáez, fue quien, en un acto de agradecimiento y voluntad política, “desengavetó” el expediente de Portes y lo envío a Roma para pagarle el favor ése, al entonces vicario: la excomunión de Duarte.
Justifica Balcácer que:
<< en una comunicación que con fecha 26 de marzo de 1845 le dirigió al papa Gregorio XVI el hatero de “El Prado”, a la sazón presidente de la República, éste simplemente se limitó a dar cumplimiento a una disposición ejecutiva y legislativa de quienes le antecedieron en el mando, sobre todo porque era necesario llenar la vacante arzobispal existente desde 1833>>
Así no amigo Balcácer… aunque sabemos que su panfleto ha sido escrito en forma falaz, carente de todo razonamiento lógico, hecho a la medida para gentes que no tienen FE en la lógica y la razón, y que por el contrario está dirigido a creyentes irracionales. Sin embargo debió de tomar en cuenta que todavía existimos seres que no hemos sido “evangelizados” que podemos descubrir sus mentiras, seres que sabemos “leer entre líneas”, y que todavía tenemos un poquito de cabeza porque no hemos sido dogmatizados, capaces de pensar y actuar libremente.
Pero bueno Balcácer, y si el presidente Santana no hubiese desengavetado el expediente, y si hubiese decidido echar para atrás la antigua decisión ¿acaso hubiese sido el vicario Portes el sacerdote recomendado a Roma?
Pero Balcácer, ¿tú crees que de haber ganado los liberales trinitarios, Duarte le hubiese pedido al papa que le nombrase a su peor enemigo como arzobispo porque “estaba obligado” a cumplir aquel viejo decreto del 11 de mayo de 1844?