Fue con un día de celebración lleno de alegría y de humanidad que el Liceo Francés de Santo Domingo festejó por todo lo alto sus 40 años de vida. En un gran encuentro multicultural se reunieron los alumnos de hoy y los de ayer, las familias de ayer y las de hoy, muchos de los que hicieron posible la creación de una escuela francesa en Santo Domingo, las autoridades de la Embajada de Francia y los que enseñan y trabajan allí en la actualidad se reunieron en un gran encuentro multicultural. Hubo música, poesía, baile, deportes, discursos y, sobre todo, mucha emoción.
Este aniversario fue la ocasión de rendirles un sentido homenaje a todos los que contribuyeron con su dedicación, cariño, trabajo y desvelo a lo que es hoy el Liceo Francés de Santo Domingo. También permitió enlazar el pasado de la institución con su presente, así como vislumbrar sus próximas perspectivas de crecimiento.
Qué alegría volver a ver a quienes fueron los pilares iniciales de este centro de enseñanza caracterizado por la excelencia, que le dedicaron buena parte de sus vidas profesionales: Nicole Weiss, la memoria del liceo, Claudine Lebreton, Monsieur Pierre, Jacques Veniel, Isabelle Iraurgui, Nicolas Droulers y Thierry Fontaine, sin olvidar de mencionar a Nurys y a Valentín.
La enseñanza de lo que es hoy el Liceo Francés se inició en unas salas puestas a disposición de este proyecto, anhelado por varias familias francesas residentes en el país, en lo que era la Casa de Francia en la calle Las Damas, con siete alumnos y una maestra francesa, Josyane Vicini.
En este entonces, este grupo no tenía cómo escolarizar sus hijos en francés y utilizaban una plataforma de educación a distancia por correo con el Centro Nacional de Enseñanza a Distancia (CNED), que permitía a los pequeños franceses prepararse para luego pasar el bachillerato francés en un liceo francés del extranjero y poder proseguir estudios universitarios en su país.
El segundo año había ya 15 alumnos. Gracias a una porción de terreno ofrecida por la Embajada de Francia, en el fondo del patio de la residencia del embajador, Patrice Le Caruyer de Beauvais, que apoyó el proyecto, en la prolongación México (hoy parte del parqueo del Supermercado Nacional de la avenida 27 de Febrero), se construyó el edificio que albergó durante 14 años la Escuela Francesa de Santo Domingo.
Este nuevo centro educativo abrió sus puertas con 56 alumnos bajo el mando de un joven director apasionado por el reto que representaba esta creación, el señor Jean-Michel Bastard, que agrupó a su alrededor un pequeño núcleo de personas decididas a encaminar este proyecto junto a él.
Cuando la Escuela Francesa resultó pequeña, fue el señor Henri Carassou que encabezó el nuevo proyecto de construcción con la edificación de un nuevo centro diseñado por el arquitecto Henri de Montdesert, ganador de un concurso abierto en esta ocasión, en un terreno donado en 1994 por el presidente Joaquín Balaguer
En este bello y espacioso lugar la escuela se transformó en el Liceo Francés, que ha tenido un desarrollo sostenido hasta llegar hoy en día a 660 alumnos y alumnas de más de 20 nacionalidades. Más de 3,500 alumnos fueron escolarizados en el Liceo Francés de Santo Domingo. Algunos solo pasaron en él algunos años; otros realizaron allí toda su escolaridad, desde la clase maternal hasta culminar con el bachillerato. Se trata, en su gran mayoría, de jóvenes exitosos hoy dispersos por todo el mundo.
En la actualidad, frente a la demanda, el liceo dirigido por el señor José Moreno, se ve de nuevo obligado a rechazar alumnos y se embarca en un nuevo proceso de crecimiento con el lanzamiento de un nuevo proyecto inmobiliario.
El liceo forma parte de la red de excelencia de la Agencia para la Enseñanza del Francés en el Extranjero (AEFE), que reúne 496 establecimientos escolares en 137 países y escolariza más de 355,000 alumnos en el mundo.
Estas escuelas, homologadas por el Ministerio de Educación Nacional de Francia, funcionan según diferentes modalidades. La gestión del liceo francés de Santo Domingo está en manos de una asociacion sin fines de lucro de derecho dominicano, bajo el amparo de un acuerdo cultural entre República Dominicana y Francia, que firma una convencion administrativa, financiera y pedagógica con el Estado francés. Esta asociación funciona gracias a la generosa y desinteresada participación de los miembros de la asociación, o sea, los padres de alumnos, que encaminan todos los proyectos y realizaciones.
Las escuelas francesas en el extranjero son lugares de intercambio y encuentros culturales y lingüísticos que escolarizan niños y niñas de todos los horizontes. Son espacios multiculturales que promueven el idioma y la cultura franceses, fomentan igualdad de oportunidades, la curiosidad intelectual y el espíritu crítico, así como los valores de laicidad, ciudadanía y tolerancia
Los grandes proyectos tienen sus héroes, y como todo lo que atañe a la comunidad francesa en este último medio siglo en la República Dominicana, “Madame” Nicole Domino, “la madame”, estuvo en el origen de la creación de la pequeña escuela francesa de Santo Domingo en sus inicios, continuando con lo que fue la Escuela Francesa de los años 1980, y aún hoy sigue dedicando sus esfuerzos al Liceo francés.
Esta dama fue también la propulsora de la Cámara de Comercio Dominico Francesa, y su esposo Pierre fue uno de los pilares de la Alianza Francesa de Santo Domingo. Nicole Domino ha sido miembro del Consejo Superior de los Franceses en el Extranjero. En la actualidad es Consejera Consular y ha sido merecedora de las más altas condecoraciones del gobierno francés.
Por toda esta labor visible e invisible, su incansable capacidad de trabajo y de escucha y su vocación de servicio para con sus compatriotas, Nicole se ha ganado el respeto, el cariño y el reconocimiento de la comunidad francesa. Por todo eso. fue homenajeada en la ceremonia de aniversario de los 40 años de existencia del Liceo Francés de Santo Domingo.