Bruselas, 24 jun (EFE).- Los líderes de dieciséis países de la Unión Europea dieron comienzo esta tarde a una cumbre informal para acercar posturas de cara al Consejo Europeo de la semana que viene, en el que la UE intentará responder a la situación de los inmigrantes que llegan por el Mediterráneo.
Los jefes de Estado y de Gobierno que participan en la reunión, convocada por la Comisión Europea a petición de Berlín, comenzaron a llegar a la sede de esta institución en Bruselas a las 14.30 hora local (12.30 GMT) y está previsto que el encuentro termine a las 19.00 hora local (17.00 GMT).
El presidente francés, Emmanuel Macron, defendió a su llegada que debe encontrarse una solución basada en los "valores" europeos y la "cooperación", ya sea entre los veintiocho Estados comunitarios o entre aquellos que "decidan avanzar juntos".
A su juicio, para ser eficaz esta solución debe combinar la cooperación con países terceros de origen y tránsito de los inmigrantes, el refuerzo de la protección de las fronteras exteriores -incluidos los centros de desembarco en territorio europeo que apoya España- y un mejor reparto entre Estados de la carga migratoria.
En el mismo sentido, la canciller alemana, Angela Merkel, expresó su confianza en lograr "rápidos acuerdos" con "algunos" de sus socios europeos en materia de política migratoria, pero no al nivel de los veintiocho miembros.
"Se trata de lograr soluciones equilibradas y justas", afirmó la canciller, antes de entrar en la cumbre informal.
Esta reunión se produce en medio de las fuertes presiones internas sobre la canciller procedentes de sus socios de coalición de la Unión Socialcristiana de Baviera (CSU), cuyo líder y ministro alemán del Interior, Horst Seehofer, exige un giro restrictivo en política de asilo.
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, consideró que la propuesta franco-alemana para crear centros de desembarco cerrados de inmigrantes en suelo europeo es "un punto de partida" con vistas a un acuerdo común y apeló ante este asunto a los valores europeos, entre ellos la solidaridad entre los Estados miembros.
El primer ministro belga, Charles Michel, por su parte, abogó por un control más "estricto" de las fronteras exteriores del bloque comunitario y por la reforma del sistema de Dublín que rige las demandas de asilo en la UE y por el cual los solicitantes tienen que pedir protección en el primer socio europeo al que llegan.
El jefe del Gobierno croata, Andrej Plenkovic, afirmó que en la reunión de hoy abordarán de manera informal cómo se puede "ser más coherentes" en términos de la dimensión externa de la migración, en la asociación con los países de origen y de tránsito y en el refuerzo de las fronteras exteriores de la UE.
Por su parte, el primer ministro danés, Lars Lokke Rassmussen, recordó que Dinamarca ha registrado las cifras más bajas de demandas de asilo en diez años, "gracias por ejemplo al acuerdo con Turquía" para que ese país acoja a refugiados.
Recalcó que la UE está haciendo progresos y se mostró satisfecho con "discutir la dimensión exterior" de la cuestión migratoria, en concreto "ideas sobre cómo resolver el problema mediante cooperación por ejemplo con países en África y de origen" de los movimientos migratorios. EFE