La Habana, 21 jul .- Miembros del colectivo LGTBI en Cuba ven como "una oportunidad única" las reformas constitucionales, debatidas hoy en el Parlamento unicameral de la isla, que prohíben la discriminación por identidad de género y abren la puerta a los matrimonios entre personas del mismo sexo.
"La verdad, es un momento feliz, un momento en que se reconoce la igualdad, en que se derrumban fronteras y estereotipos, en que se reconoce al ser humano como ser humano y no como etiquetas, un momento en que se garantiza seguridad jurídica y social para todos", dijo a Efe José Ernesto González.
Para González, periodista y miembro de la comunidad LGTBI, la actualización de la Constitución vigente (1976), supone "poner a Cuba en un escaño superior en materia jurídica no solo en la región sino a nivel global".
La modificación del concepto de matrimonio en la Carta Magna de la "unión voluntaria entre un hombre y una mujer" al enlace "entre dos personas", significaría un enorme paso de avance en la conservadora isla comunista, donde hasta hace unas décadas los homosexuales eran considerados una "lacra social".
Esta propuesta, presentada este sábado ante el pleno de la Asamblea Nacional (Parlamento) junto a otros cambios como el reconocimiento de la propiedad privada, será sometida a una consulta popular donde los activistas ven "necesaria" la labor de concienciación al resto de la sociedad.
El secretario del Consejo de Estado cubano, Homero Acosta, subrayó que "la nueva Constitución no podía eludir a este asunto", "que ha sido analizado y debatido" por la comisión encargada de la reforma de la Carta Magna, dirigida por el expresidente y líder del gobernante Partido Comunista de Cuba (PCC, único), Raúl Castro.
Acosta insistió en que esta modificación "es un acto de justicia" y expresó su confianza en que "el pueblo va a entender las razones" para este cambio, que será analizado próximamente en consulta popular y luego irá a referendo.
"No se puede desaprovechar el momento para hacer activismo, levantar la moral, fomentar la unidad, poner nuestro debate en la boca de la mayoría. (…) Es una oportunidad única", escribió Raúl Regueiro en el grupo público "Construyendo una agenda de la diversidad sexual en Cuba" en Facebook.
A pesar de que Cuba permanece como uno de los países más desconectados del mundo, esta red social se ha convertido en una activa plataforma para los defensores de una "familia cubana inclusiva" y un medio para organizarse y coordinar acciones.
También ha servido para socializar demandas que incluyen además la garantía del acceso de las parejas homosexuales a la adopción y la reproducción asistida, gratis en el país caribeño.
Con etiquetas como #unafamiliamuyoriginal y #matrimonioigualitarioya, el activismo LGTBI ha salido al paso a una campaña de varias iglesias cristianas que abogan por mantener el "diseño original" del matrimonio, que solo incluiría a "un hombre y una mujer".
Los carteles rediseñados se apropian de los símbolos usados por los detractores de la reforma constitucional y se declaran "a favor del diseño cubano" de familia, "inclusiva y plural".
"¡Guau, realmente vamos a seguir entrando en el siglo XXI!", exclamó en declaraciones a Efe la diseñadora cubana Idania del Río, miembro activo de la comunidad gay y cofundadora de la marca de moda Clandestina, que muestra el cartel modificado en su concurrida tienda de La Habana Vieja.
Del Río se mostró "muy contenta, porque hace tiempo ya que se escuchaba, se sabía que se iba a valorar ese cambio en la Constitución" y destacó que la noticia ha sido "increíble" y "lo más importante es que se convierta en un paso hacia más tolerancia, más entendimiento, menos enfrentamiento, más inclusión".
"Estamos todos muy contentos, (Cuba) es un país en el que hay esperanza de futuro, se está convirtiendo en un país moderno, una sociedad más avanzada y eso para los niños, para la gente que venga detrás, va a ser algo que les va a facilitar mucho la vida", sostuvo. EFE