SANTO DOMINGO-. De depósito de cenizas a botadero. El Ministerio de Energía y Minas y la Administración de la Planta Termoeléctrica Punta Catalina vuelven a restregar la “irresponsabilidad” que tuvo la pasada gestión en el funcionamiento de la Termoeléctrica Punta Catalina, esta vez por el “desorden” que dejó en el manejo de las cenizas que generan la producción de energía de la Termoeléctrica Punta Catalina.
El ministro Antonio Almonte explicó que durante la administración anterior de Punta Catalina, “las cenizas fueron colocadas de manera absolutamente desordenada y en cierto sentido irresponsable… No hubo seguimiento al proceso de compactación para que fuera ciertamente un relleno, y no un vertedero de cenizas”.
Este mal manejo, sin embargo, no ocurrió cuando el consorcio Odebrecht depositaba estos residuos de manera organizada y compactada. El administrador de Punta Catalina, Serafín Canario, especificó que fue a partir de octubre del 2019 cuando se entrega a la CDEEE, “que se empezó a hacer la deposición de las cenizas de forma caótica y eso fue lo que nosotros heredamos”.
Canario expresó no comprender por qué “no buscaron una solución adecuada desde el inicio” de la deposición de cenizas en la gestión anterior, aun cuando tenían los equipos técnicos y los ingenieros cualificados para ese fin.
“El desorden del patio de cenizas fue heredado por nosotros. Nos fue entregado así en agosto 2020 por la pasada administración de Punta Catalina y nuestra administración en pocos meses, ha alcanzado la solución técnica a dicha situación”, agregó Serafín Canario.
Canario explicó que la central producen alrededor de 1,000 toneladas de cenizas (540 toneladas de cenizas volante y 460 toneladas de cal) que se están depositando en el patio de cenizas y con la solución técnica que han impulsado, el depósito se reducirá a 100 o 200 toneladas por día.
Ahora mismo, la administración trabaja en la adecuación de un relleno sanitario que pueda extender la vida por tres o cuatro años y, como solución definitiva, esta gestión ha iniciado la cotización de equipamiento, modificaciones técnicas y trabajo de ingeniería para permitir que las cenizas puedan ser vendidas en un 90% a las fábricas de cemento del país.
Esa solución definitiva, "es un trabajo que se llevará un tiempo puede ser meses, puede ser prácticamente un año, se va a llevar tiempo y va a costar un dinero, pero es mucho menos que el daño que podría causar eventualmente a la sociedad y al medio ambiente", especificó Almonte en rueda de prensa este martes. Aclaró que en lo que se encuentran en ese punto, el relleno sanitario brindará una solución de tres a cuatro años, mientras tanto.
Las autoridades no han establecidos daños ambientales por el mal depósito de estas cenizas, que aparentemente se extendió por 10 meses, desde octubre del 2019 hasta agosto pasado.
Advirtieron que este mal manejo produjo una reducción de aproximadamente 25% de la vida útil de la celda “A”, utilizada como depósito, ya que la capacidad de almacenamiento se agotó en noviembre de 2020. Entonces, procedieron a depositar las cenizas en la celda “B” que estaba parcialmente concluida.
La pasada administración entregó el 18 de agosto de 2020 a la nueva gestión el Patio de Cenizas convertido en un botadero de cenizas, en lugar de un relleno sanitario, ya que no respetaron las normas ambientales que se deben aplicar en el manejo de dicho patio”, Canario.
En esta rueda de prensa, los funcionarios explicaron que las centrales eléctricas de carbón incluyen necesariamente la captura, gestión y deposición de la ceniza de acuerdo a procedimientos, planos y especificaciones ambientales que garanticen un mínimo impacto ambiental y humano. Y este diseño lo tiene la Central Punta Catalina, aunque según las palabras de los funcionarios, la pasada gestión no aplicó.