El Observatorio Jurídico Dominicano emitió una opinión sobre la situación legal del ex nuncio apostólico en la República Dominicana, Jozef Wesolowski, pero comete errores que podrían significar un manto de sombra sobre la responsabilidad de otros relacionados, que dieron apoyo al ex nuncio y facilitaron su salida del país, en forma subrepticia.

El caso no puede dejarse pasar por alto, porque la opinión del Observatorio Jurídico Dominicano podría incluso influir en posteriores decisiones de la justicia dominicana, en el caso de que se admitiera como válida la opinión de que es posible el juzgamiento penal del ex obispo que estuvo ocho años representando a dos papas en la República Dominicana.

Veamos lo que dijo el Observatorio Jurídico Dominicano en los siguientes dos párrafos:

"En cuanto al caso del exnuncio, debe observarse, que las denuncias fueron realizadas en el año 2013, cuando las víctimas ofrecieron testimonio sobre la forma en que acontecieron los hechos. Sin embargo, su sometimiento a la jurisdicción penal no fue posible pues el imputado gozaba de la inmunidad diplomática. Ante estas denuncias, el cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez sostuvo una reunión con el papa Francisco en el mismo año, en la cual le informó de los rumores que giraban en torno al enuncio.

"El 21 de agosto de 2013, la Santa Sede retiró de sus funciones a su representante diplomático en República Dominicana y Haití, con la finalidad de que se presentara ante el Estado del Vaticano. La justificación del traslado fue que el exnuncio había tenido inconvenientes con el Arzobispado de San Juan, Puerto Rico y que por tal razón, la Santa Sede lo trasladaba".

En realidad, los hechos narrados en estos dos párrafos ocurrieron de otro modo. Es lo que nos proponemos precisar aquí:

El 22 de agosto de 2013 se hizo público el contenido de una breve carta fechada en Santo Domingo el 21 del mismo mes, firmada por las iniciales "RA". La carta, dirigida a los obispos puertorriqueños, dice "…tiene el deber de informar que su excelencia monseñor Josef Wesolowski, Nuncio Apostólico, ha terminado definitivamente sus funciones a partir de hoy miércoles 21 de agosto de 2013″.

Mas luego, el 27 de agosto, Listin Diario informó: "Fue confirmada ayer la destitución por parte de la Santa Sede del nuncio Apostólico en RD, Jozef Wesolowski. Según la versión aparecida en la publicación Vatican Insider La Stampa de Torino, bajo la firma de Andres Beltramo Alvarez, hubo una “cesación del representante del Vaticano en el país…”

En esa misma versión se da cuenta de la pugna con el arzobispo de Puerto Rico, pero obvia hacer referencia a las alegaciones de abusos sexuales.

Fue Acento.com.do el 28 de agosto que se hizo la pregunta: ¿Cuál es la verdadera causa de la destitución del nuncio Wesolowski?, vinculando por primera vez (aparte del siguiente reportaje de Nuria Piera) la destitución con los presuntos abusos sexuales. Mas luego, el 2 de septiembre, es cuando Nuria destapa todo con su reportaje. El 4 de septiembre Agripino afirma que Jozef Wesolowski fue destituido por pederastia, pero y la Conferencia del Episcopado lo desautoriza y lo manda a callar (5 de septiembre).

La Conferencia Episcopal habla de los presuntos abusos sexuales y dice que esto "preocupa y averguenza a los obispos y a la Iglesia Católica en sentido general" y pide a la justicia dominicana que actúe con firmeza en base a investigaciones serias y que se establezcan las sanciones que están previstas en el Código Penal.

El mismo 5 de septiembre la Fiscalía del Distrito Nacional dice que había iniciado una investigación sobre las denuncias en relación al destituido nuncio. El 11 de septiembre se hace público que el Cardenal Nicolás López Rodríguez informó personalmente al Vaticano sobre el nuncio y que este seria juzgado por el tribunal de la Congregación para la Doctrina de la Fe del Vaticano por las denuncias de supuesto abuso sexual de menores y que el mismo  Cardenal había viajado al Vaticano para informar al papa Francisco.

Como puede observarse, no había denuncias públicas sobre Jozef Wesolowski (salvo las de Juncalito y la mención en el programa Código Calle, de Addis Burgos de las visitas de niños a la casa de la Nunciatura en Juan Dolio) cuando el Cardenal viaja a Roma a informar al papa.

Por tanto, el primer párrafo  del informe de Observatorio Jurídico Dominicano "confunde" en cuanto a la secuencia de los hechos. El nuncio no pudo ser sometido a la jurisdicción penal dominicana no solo porque gozaba de inmunidad diplomática sino porque al salir al aire la denuncia de Nuria Piera, este estaba desde hacia ya varias semanas en Roma.

Por tanto, el inicio de la primera frase del segundo párrafo del informe es doblemente errada: primero, la Santa Sede no retiró de sus funciones al Nuncio el 21 de agosto, sino que lo destituyó y, más importante aún, no lo "retiró" el 21 de agosto "con la finalidad de que se presentara ante el Estado del Vaticano”.

De aceptarse los hechos como los relata, muy superficialmente el Observatorio Jurídico Dominicano, habría que concluir que la Iglesia Católica dominicana y la Santa Sede han actuado correctamente en este caso, y todo el mundo sabe, porque lo hemos vivido, que en la República Dominicana y en el mundo esta entidad religiosa ha actuado encubriendo a sus dignatarios en los casos de delitos sexuales. Y que aunque ahora sea juzgado, el señor Wesolowski recibió protección para sus actos de abusos sexuales y pudo desplegar su red, incluyendo a sacerdotes y seminaristas, por la tolerancia eclesial hacia esos delitos al interior de la Iglesia Católica.