Laura Guerrero Pelletier, Procuradora Adjunta y directora de la Procuraduría Especializada en Persecución de la Corrupción Administrativa (PEPCA), estaba muy activa con el tema de los Tucano y las implicaciones y ramificaciones que ese tema tiene en varias instancias del gobierno dominicano.
De pronto su constante presencia en los medios de comunicación ha desaparecido. Como por arte de magia se ha esfumado, y sus palabras en el sentido de que la designación de un nuevo Procurador General de la República no detendría ni el caso de los Tucano ni los demás casos en agenda, incluyendo el expediente de INAPA, que involucra al ingeniero Alberto Holguín.
Da la impresión, su silencio, que Laura Guerrero sí encontró un obstáculo importante para seguir haciendo su labor en la PEPCA, y que el caso Tucano se ha quedado entrampado en la lucha del coronel Carlos Piccini por obtener su libertad, como la conseguieron los demás imputados. Dice Piccini que la investigación está parcializada y que él fue apenas un ejecutor de órdenes superiores. Pedro Peña Antonio también ha exigido "un trato igualitario", luego que se dictara medidas de coerción en su contra.
En las informaciones periodísticas sobre el caso Laura Guerrero no ha vuelto a aparecer, ni a comparecer a los tribunales, ni ha entregado declaraciones a los medios de comunicación, y menos ha vuelto a tocar el tema del senador Luis René Canaán, señalado por el expediente como la persona clave con la distribución del dinero entre los legisladores.
Incluso, jamás se ha vuelto a tocar el tema del senador Luis René Canaán. No hay ningún proceso judicial que lo obligue, por ejemplo a comparecer a un interrogatorio, ni se ha procedido con el protocolo de solicitar permiso al Senado de la República, tomando en cuenta que a partir del 16 de agosto el Congreso Nacional reinició sus actividades.
Hay que recordar que la PEPCA recibió cooperación internacional y en particular de Brasil para este caso, así como apoyo jurídico del exterior sobre la entrega de dinero que hizo Embraer a funcionarios dominicanos, como parte de un soborno con serias implicaciones en terceros países y en particular en los Estados Unidos.
En el caso Tucano los principales imputados son el ex ministro de las Fuerzas Armadas, mayor general Pedro Rafael Peña Antonio, y el senador Luis René Canaán. El informe de cuatro páginas de la PEPCA dice que fue el congresista mencionado quien “recibió del coronel Carlos Ramón Piccini Núñez…los dineros del soborno transnacional conferido por los ejecutivos de la empresa brasileña de aeronáutica, con miras a garantizar los votos necesarios para lograr la aprobación del empréstito ante el Congreso de la República, por la suma de casi 94 millones de dólares para la compra de 8 aeronaves”.
Por ello, la PEPCA determinó que los altos oficiales y el senador incurrieron en ilícitos que están señalados en los artículos 166, 265 y 266 del Código Penal Dominicano, y violaron la ley 448-06 sobre soborno transnacional en el comercio y la inversión, más violaron la ley 72-02 sobre lavados de activos provenientes del tráfico ilícito de drogas y sustancias controladas y otras infracciones graves, más violentaron la ley 82-70 sobre declaración jurada de patrimonio, en la parte correspondiente a enriquecimiento ilícito.
Desde el 18 de agosto pasado, dos días después de designado el nuevo Procurador General de la República, Jean Alaín Rodríguez, Laura Guerrero no toma la palabra. Está desaparecida de los medios de comunicación.
El pasado 2 de septiembre, el Procurador prometió que con los casos Tucano e INAPA “no habrá engavetamientos, ni paños tibios”. Desde entonces no se ha vuelto a hablar del tema. Y el Procurador es selectivo cuando ofrece sus declaraciones: excluye a la televisión y a los demás medios, privilegiando los medios impresos, que son los únicos que pueden recibir datos suyos.
Luego el señor Rodríguez dijo que fortalecerá la PEPCA ¿Cómo? Que contratará más personal ¿para qué? Lean sus palabras:
“Vamos a fortalecer la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca), razón por la cual ya estamos haciendo esfuerzos para aumentar el personal, reforzar el equipamiento y aumentar las capacitaciones especializadas que recibe este equipo”. ¡Oh Dios!
Sospechamos que si Laura Guerrero ha desaparecido del escenario público, al igual que las gestiones del Ministerio Público en el caso Tucano y en el caso INAPA, no es por falta de voluntad o de datos de la propia Laura. Nuestra sospecha es que el Procurador ha engavetado el asunto, por lo menos la parte que corresponde al Ministerio Público.