Andrés Dauhajre, economista, hizo público un comunicado este lunes, en el que explica su participación en el proyecto Punta Catalina. Dice haber cumplido con su trabajo como ente profesional independiente, y por las asesorías que ofreció recibió los pagos pactados.
El economista dice haber ofrecido su asesoría a la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), durante la licitación de Punta Catalina. Luego, en enero 2014, fue contratado por Odebrecht para presentar opciones de financiamiento al gobierno para Punta Catalina. Ese trabajo fue hasta el 2015, y le pagaron a través de su empresa Baker Street Financial, la misma empresa que utilizó para comprar un apartamento en Nueva York, aportando -dice él- los ahorros de más de 30 años de ejercicio profesional. Andy -como cariñosamente se le conoce, explica que no fue funcionario público, y por tanto no tenía impedimento alguno para proveer un servicio de consultoría privada a una empresa privada. “Para quien suscribe fue un honor y un privilegio prestar servicios de consultoría a Odebrecht, en aquel momento la empresa global de ingeniería y construcción más grande y prestigiosa de Latinoamérica”, dice el doctor Dauhajre.
En su explicación no hay ningún dato que indique una espera por parte del economista Dauhajre de algún llamado del Ministerio Público. Su mensaje está dirigido “A la nación”, y lo que queda entendido es que su mensaje es para responder los alegatos de que él estaría involucrado en la recepción de sobornos, porque los pagos recibidos por sus empresas procedían del Departamento de Operaciones Estructuradas (sobornos) de Odebrecht. Medios de comunicación y redes sociales han dado por confirmado que el economista Dauhajre es parte de la trama fraudulenta y debe ser interrogado y procesado judicialmente. Tanto es así, que el doctor Guido Gómez Mazara, en el día de ayer lunes, se presentó ante las autoridades del Ministerio Público para someter judicialmente a Andrés Dauhajre por haber jugado un “papel sospechoso” durante el proceso de licitación de la planta Punta Catalina.
El Ministerio Público ha dicho hasta ahora que está enterado de las denuncias del Consorcio Internacional de Periodismo de Investigación, y que actuará luego de avaluar los documentos.
José Manuel Guzmán Ibarra, sub-administrador del Banco de Reservas, presentó su carta de dimisión a sus superiores, desligó a la entidad en la que trabajó de sus actuaciones, y dijo que él es el único responsable de sus actos.
Guzmán Ibarra, economista también, si espera que lo llamen y dijo que responderá a cualquier autoridad competente que requiera de sus declaraciones. En su carta dirigida a Simón Lizardo, administrador del Banreservas, dice lo siguiente:
“Sintiendo que he cumplido con mi deber en la Institución y debido a que soy el único responsable de mis decisiones personales y a que debo atender con urgencia dichos asuntos, presento formal e inmediata renuncia libre y personalmente a mi puesto como Sub-Administrador del Banco de Reservas”. Si se ha referido a que debe “atender con urgencia dichos asuntos”, se refiere a que ya ha sido informado por las autoridades que será llamado a declarar e informar las razones por las que recibió fondos de Odebrecht.
Igual que Dauhajre, el economista Guzmán Ibarra recibió fondos del Departamento de sobornos de Odebrecht, y los recibió en una sociedad offshore, y por supuesto ninguno de los dos cumplió con sus obligaciones tributarias por los montos recibidos. Otra cosa tiene que ver con las triangulaciones realizadas por la empresa brasileña para que estos fondos llegaran a sus destinatarios, y con el uso de pseudónimos para que ellos no pudieran ser identificados ni siquiera por los empleados de Odebrecht.
Insistimos, son muchas las preguntas que se desprenden de estos documentos.
Todavía el Consejo Directivo de la Bolsa de Valores de República Dominicana, que preside el señor Gregory Salcedo Llibre, señalado como receptor de fondos de Odebrecht, de su departamento de sobornos, no ha dicho nada. ¿O será el propio presidente Gregory Salcedo Llibre quien se auto margine de una entidad privada que reclama ética y transparencia?