La oposición política al Partido de la Liberación Dominicana, y a su gobierno, ha quedado por debajo de sus expectativas en el conteo final de votos realizado por la Junta Central Electoral.
Apenas tres senadores, de 31, 65 diputados, de 190, y 54 alcaldías, de 158, es poco significativo para el esfuerzo que hizo la oposición en la competencia electoral.
Sin embargo, es una ganancia significativa en un escenario en que no estaba definida la oposición al gobierno del presidente Danilo Medina. El principal partido de oposición, que era el PRD, se convirtió en aliado del PLD y del gobierno. El PRSC, que era aliado del gobierno, debido en una fuerza contestataria, que sorpresivamente decidió pactar con el novísimo Partido Revolucionario Moderno, de la oposición, que seguir disfrutando las mieles del poder.
Son oposición ahora, y con miras al siguiente período de gobierno, el Partido Revolucionario Moderno, que alcanzó casi el 35% de los votos. 12% menos de lo conseguido por el PRD en las elecciones del presidenciales del 2012, con Hipólito Mejía de candidato presidencial, frente a Danilo Medina, que no había sido presidente. También es parte de la oposición el PRSC, obtuvo una posición en el Senado y alcanzó 14 diputaciones y numerosas alcaldías.
Seguirán en la oposición los ex aliados del PLD, ahora más empequeñecidos por la cantidad de votos alcanzada, el Partido Quisqueyano Demócrata Cristiano (PQDC), la Fuerza Nacional Progresista (FNP), y el Partido de la Unidad Nacional (PUN).
Opción Democrática, salido de las filas del PLD con Minou Tavarez Mirabal, junto a su aliado Alianza por la Democracia (APD), también ex aliado del PLD, quedan en la oposición, lo mismo que Alianza País, que preside Guillermo Moreno, y que obtuvo una posición colindante con el 2% de los votos, y que por ello alcanzó dos diputados nacionales, lo mismo que el PQDC.
Esa oposición variopinta, ideológicamente amalgamada, con partidos de la derecha, del centro y de la izquierda, está obligada a tomar decisiones políticas relevantes para conseguir objetivos políticos importantes, como una nueva ley electoral, una ley de partidos políticos y la escogencia de miembros de la JCE y del TSE ajenos a los partidos políticos, en particular al oficialismo, que ahora lo controla todo.
En la campaña electoral no fue posible que se pusiera de acuerdo, y apenas unas cuantas horas antes de las elecciones fue que percibieron el real peligro que tenían por delante, y comenzaron a actuar en forma conjunta. Era tarde ya para que sus actuaciones tuvieran efecto. Lograron el conteo manual de las boletas electorales, en todos los niveles, pero aquello fue apenas un acuerdo de palabra, que no se cumplió y que los dejó anonadados.
A esa oposición le quedan por delante muchas batallas. Una de las primeras será conseguir el recuento de votos o la realización de elecciones parciales en lugares donde hubo mucho desorden, como Santo Domingo Este o Santo Domingo Norte. La otra será determinar si desde ahora actúan conjuntamente, entre iguales, como ha sido desde el 13 de mayo, o si el poder demostrado por el PRM, que obtuvo casi el 35% de los votos, es reconocido como los demás, en función de la principal fuerza opositora.
Hay todavía incógnitas que no tienen respuestas. Por ejemplo, el PRSC expulsó a una gran parte de su dirección, que luego se reagrupó junto al PLD, en el llamado Directorio Presidencial Balaguerista, encabeza por Marino Collante y un grupo significativo de líderes del reformismo histórico, entre los que se encuentra Rafael Bello Andino y Rafaela Alburquerque. ¿Se reunificará el reformismo, luego de este resultado electoral o habrá un nuevo partido Reformista, como el Liberal de Amable Aristy Castro, que fue aliado al gobierno?
Otra pregunta ¿Cuál es el futuro de la alianza del PRSC con el PRM? El PRSC le aporta casi el 6% de los votos al 35% de Luis Abinader. ¿Ese porcentaje fue por estar en la casilla 3 y llevar la fotografía de Abinader como candidato presidencial? ¿Fue un porcentaje de votos que le llegó por ignorancia de los que preferían a Abinader y no encontraron a tiempo la casilla 15 del PRM?
Y una pregunta final: ¿Seguirán apostando a un fortalecimiento de sus propias parcelas, por derecho propio, pese a los resultados adversos, las fuerzas emergentes filo izquierdistas, como la APD y Alianza País?